El Caja Laboral doblegó al Partizan de Belgrado en un partido que le ha servido para certificar su presencia en el Top 16 de Euroliga como segundo clasificado de su grupo en la fase regular.
El Caja Laboral doblegó al Partizan de Belgrado (87-71) en un plácido partido que le ha servido para certificar su presencia en el Top 16 de Euroliga como segundo clasificado de su grupo en la fase regular.
Los de Ivanovic apretaron al final del segundo cuarto y el inicio del tercero para lograr una cómoda ventaja próxima a los veinte puntos y deshacerse de un Partizán que sólo puso resistencia en los minutos iniciales del duelo y luego fue un amable invitado.
El Baskonia logró su objetivo de llegar al Top 16 después de enderezar el rumbo en las dos últimas jornadas y espera un sorteo benévolo que no le lleve a enfrentarse a rivales complicados.
El partido arrancó con la ausencia de última hora de Nemanja Bjelica por unas molestias en la espalda y sin la tensión necesaria entre dos equipos ya clasificados para el Top 16.
Desde Moscu llegaron buenas noticias con el triunfo de Khimki ante Zalgiris, 93-89 en la prórroga, que allanó el camino a los de Ivanovic hacia la segunda plaza.
Caja Laboral se apoyó en el primer tiempo en el acierto de Brad Oleson, trece puntos, y la pelea de Pape Sow en la pintura, nueve, para llegar al intermedio con su máxima renta, 41-30.
Los vitorianos quisieron sentenciar en la reanudación aplicando una marcha más al partido. Con el despertar anotador de Teletovic, situaron la renta entre los quince y veinte puntos y se aplicaron para evitar las desconexiones que les han costado más de un disgusto en otros duelos.
El Partizan ayudó lo suyo con un flojo segundo tiempo en el que en ningún momento llego a discutir la supremacía baskonista en el partido y hasta Dusko Ivanovic concedió minutos a los no habituales Musli, Buesa y García.