La Federación inglesa de Fútbol (FA) negó anoche haber mantenido conversaciones para situar a David Beckham en un puesto en el equipo técnico de la selección junto a Harry Redknapp, actual entrenador del Tottenham.
El mensaje emitido por la FA trataba de acallar la especulación surgida el miércoles por la tarde sobre una posible negociación con Redknapp para que éste dirija a Inglaterra con Beckham como mano derecha cuando el italiano Fabio Capello deje el cargo tras la Eurocopa de 2012.
"No han existido esas conversaciones y no hemos debatido todavía con nadie ningún plan de sucesión potencial", indicó un portavoz de la Federación a los medios de comunicación para desmentir los rumores.
El informe que motivó tal noticia indicaba que los directivos de la FA habían mantenido "conversaciones informales" tanto con Redknapp, de 63 años, como con el asistente de Beckham, de 35. Precisamente, al actual centrocampista de los Galaxy de Los Ángeles y ex militante del Manchester United se le señalaba como objetivo de un plan a la largo plazo para que algún día llegara a lo más alto en el papel de entrenador.
Redknapp suena ya desde noviembre como uno de los candidatos a dirigir la selección nacional de Inglaterra, aunque por el momento la única voluntad expresada por ese entrenador es la de hacerse cargo del equipo de fútbol que presente el Reino Unido en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Su nombre empezó a considerarse a raíz de su buen trabajo hecho en la entidad de White Hart Lane, a la que llevó a disputar esta temporada su primera Liga de Campeones tras casi medio siglo y la clasificó el mes pasado como primera de grupo para los octavos de final de esa competición.
Precisamente Redknapp aprovechó su rueda de prensa de anoche, tras su partido ante el Everton, que perdió por 2-1, para expresar claramente su deseo por acoger a David Beckham en su plantilla en los próximos dos meses por un corto contrato de cesión durante el descanso de la Liga estadounidense