"Debo llegar bien recuperado a Australia", explica.
Rafael Nadal permanecerá en Doha al menos hasta mañana para cerrar la recuperación del proceso gripal que, entre fiebre y tratamiento de antibióticos, le ha afectado durante todo el Open de Qatar. Nadal estuvo cerca de retirarse durante su semifinal del viernes ante Davydenko, que acabó perdiendo, aunque luego pudo sellar el título de dobles, junto a Marc López.
"Me sentí tan mal ante Davydenko, que, por un momento, pensé en abandonar. Me vi terrible tras cuatro o cinco juegos, pero un abandono nunca es justo para el público, los organizadores y el rival; no estaba preparado para un ritmo como el de Nikolay, que es más fuerte que el de Gulbis. Además, yo estaba peor. Mentalmente, te fastidia cuando Davydenko te mueve en tres o cuatro bolas y no estás allí. Perdí contra alguien mejor que yo, pero incluso en dobles tuve problemas", razonó Nadal.
Sano.
Rafa explicó su permanencia en Doha: "Cada día de esta semana ha sido difícil. En mi estado, lo más razonable es descansar unos días. Me quedo para estar sano antes de viajar: los aviones siempre te empeoran, y debo llegar bien recuperado a Australia, donde me espera mucho trabajo". En Melbourne, Rafa se reencontrará con Toni, su tío y entrenador, y con el doctor Ruiz Cotorro.