Tal y como informó MD hace unos días, Leo Messi se ha marcado, al
margen de lograr todos los títulos posibles tanto a nivel colectivo
como individual, el 'Pichichi' de la Liga. Con sus dos tantos de ayer,
el argentino empieza a cumplir su promesa ya que se ha convertido en el
'Pichichi' en solitario, con dos tantos más que David Villa. Messi ha
marcado 12 con el pie, uno de ellos de penalti, y los otros dos con la
cabeza.
Pero los goles de Messi van mucho más allá del campeonato doméstico.
En total, suma ya 21 dianas en lo que va de temporada: las 14 de la
Liga, dos en Champions, uno en la Copa, dos en Supercopa de España y
dos en el Mundial de clubs, uno de ellos el que valió para que el Barça
se impusiera en la final ante Estudiantes de La Plata.
En definitiva, y tras su 'hat-trick' en Tenerife hace sólo una
semana, Messi quiere demostrar que el número uno del mundo es un
estatus inherente a su clase y que lo conservará por muchos años.
FUENTES = MUNDO DEPORTIVO
COMENTARIO = posiblemente busca el ultimo titulo individual que le queda ser bota de oro
margen de lograr todos los títulos posibles tanto a nivel colectivo
como individual, el 'Pichichi' de la Liga. Con sus dos tantos de ayer,
el argentino empieza a cumplir su promesa ya que se ha convertido en el
'Pichichi' en solitario, con dos tantos más que David Villa. Messi ha
marcado 12 con el pie, uno de ellos de penalti, y los otros dos con la
cabeza.
Pero los goles de Messi van mucho más allá del campeonato doméstico.
En total, suma ya 21 dianas en lo que va de temporada: las 14 de la
Liga, dos en Champions, uno en la Copa, dos en Supercopa de España y
dos en el Mundial de clubs, uno de ellos el que valió para que el Barça
se impusiera en la final ante Estudiantes de La Plata.
En definitiva, y tras su 'hat-trick' en Tenerife hace sólo una
semana, Messi quiere demostrar que el número uno del mundo es un
estatus inherente a su clase y que lo conservará por muchos años.
FUENTES = MUNDO DEPORTIVO
COMENTARIO = posiblemente busca el ultimo titulo individual que le queda ser bota de oro