Ya está en Madrid y será el portero que el Atlético de Madrid ha decidido como reemplazo de David De Gea.
Thibaut Curtois, de 19 años, aterrizó este jueves en Barajas y esta mañana pasará revisión médica para convertirse en nuevo jugador del Atleti.
Más allá de sus condiciones, no se entiende demasiado que, siguiendo las palabras de José Luis Caminero, se apueste por un portero tan joven.
Recordemos que hace unas semanas, el director deportivo del Atleti afirmaba que con la salida de De Gea, analizarían el estado de Asenjo y traerían un portero de experiencia para compaginar sus labores con el canterano Joel quien, por cierto, podría decidirse a salir del club si no le ofrecen garantías de oportunidades.
Curtois, según medios belgas, llegaría cedido por dos temporadas al club del Manzanares. Los colchoneros pagarían toda su ficha y el costo del préstamo, aún sin aclarar.
Especial Courtois: Juventud belga bajo palos
El portero, internacional absoluto a falta de debut, ha sido la gran revelación del campeonato belga y mantendría en el Calderón la juventud en la portería.
Necesitado
de representantes en clubes de máximo nivel continental, el fútbol
belga lleva varios años apostando por su cantera de manera evidente,
apuntalando sus categorías inferiores y logrando un salto cuantitativo de cara al futuro que se empieza a notar en breve.
Uno de los últimos ejemplos en alcanzar el primer escalón de esa
cúspide de juventudes ejemplares, ha sido el gigante Thibaut Courtois,
el portero del futuro no sólo en Bélgica, sino en los principales
reclamos europeos.
Criado en el modesto Bilzen y
explotado durante doce cursos con paciencia y sacrificio por el Genk,
el pasado curso fue su año decisivo. Tomó las riendas bajo palos del
club que, a la postre, acabaría siendo la gran sorpresa nacional al
levantar el título, un Genk que lleva años apostando por gente joven y
que en Courtois encontró un portero de gran altura (1,98), referente en
su área, rápido en movimientos y de grandes reflejos. Su progresión ha
sido rápida, brutal desde el punto de vista comercial y tras ser elegido
mejor jugador del Genk esta campaña y ser llamado para la selección
belga absoluta, las ofertas no dejaron de llegar.
Courtois empezó a sonar como futurible para clubes de primer nivel y al final, el Chelsea lo contrató hace solo una semana por 9 millones de euros y cinco años por delante. Los Blues,
conscientes de que con el checo Petr Cech tienen un guardameta fiable
por ahora, lo cerraron pensando en el futuro y lo sacaron a mercado de
inmediato para encontrar un club adecuado donde pueda foguearse y crecer
hasta que esté preparado para ser el referente de la portería de
Stamford Bridge.
El Atlético de Madrid, sin portero fijo tras la
venta de David De Gea, ya se había interesado en el belga que ahora
llega al Vicente Calderón cedido para pelear una plaza con Asenjo y
Joel, otros dos referentes de juventud bajo palos. Potencia, seguridad en progresión, corpulencia y muchísima juventud, para seguir creciendo en busca de mayores retos.
Thibaut Curtois, de 19 años, aterrizó este jueves en Barajas y esta mañana pasará revisión médica para convertirse en nuevo jugador del Atleti.
Más allá de sus condiciones, no se entiende demasiado que, siguiendo las palabras de José Luis Caminero, se apueste por un portero tan joven.
Recordemos que hace unas semanas, el director deportivo del Atleti afirmaba que con la salida de De Gea, analizarían el estado de Asenjo y traerían un portero de experiencia para compaginar sus labores con el canterano Joel quien, por cierto, podría decidirse a salir del club si no le ofrecen garantías de oportunidades.
Curtois, según medios belgas, llegaría cedido por dos temporadas al club del Manzanares. Los colchoneros pagarían toda su ficha y el costo del préstamo, aún sin aclarar.
Especial Courtois: Juventud belga bajo palos
El portero, internacional absoluto a falta de debut, ha sido la gran revelación del campeonato belga y mantendría en el Calderón la juventud en la portería.
Necesitado
de representantes en clubes de máximo nivel continental, el fútbol
belga lleva varios años apostando por su cantera de manera evidente,
apuntalando sus categorías inferiores y logrando un salto cuantitativo de cara al futuro que se empieza a notar en breve.
Uno de los últimos ejemplos en alcanzar el primer escalón de esa
cúspide de juventudes ejemplares, ha sido el gigante Thibaut Courtois,
el portero del futuro no sólo en Bélgica, sino en los principales
reclamos europeos.
Criado en el modesto Bilzen y
explotado durante doce cursos con paciencia y sacrificio por el Genk,
el pasado curso fue su año decisivo. Tomó las riendas bajo palos del
club que, a la postre, acabaría siendo la gran sorpresa nacional al
levantar el título, un Genk que lleva años apostando por gente joven y
que en Courtois encontró un portero de gran altura (1,98), referente en
su área, rápido en movimientos y de grandes reflejos. Su progresión ha
sido rápida, brutal desde el punto de vista comercial y tras ser elegido
mejor jugador del Genk esta campaña y ser llamado para la selección
belga absoluta, las ofertas no dejaron de llegar.
Courtois empezó a sonar como futurible para clubes de primer nivel y al final, el Chelsea lo contrató hace solo una semana por 9 millones de euros y cinco años por delante. Los Blues,
conscientes de que con el checo Petr Cech tienen un guardameta fiable
por ahora, lo cerraron pensando en el futuro y lo sacaron a mercado de
inmediato para encontrar un club adecuado donde pueda foguearse y crecer
hasta que esté preparado para ser el referente de la portería de
Stamford Bridge.
El Atlético de Madrid, sin portero fijo tras la
venta de David De Gea, ya se había interesado en el belga que ahora
llega al Vicente Calderón cedido para pelear una plaza con Asenjo y
Joel, otros dos referentes de juventud bajo palos. Potencia, seguridad en progresión, corpulencia y muchísima juventud, para seguir creciendo en busca de mayores retos.