Todo hace indicar que la salida más
complicada del inicio liguero la tendrá el Villarreal. Nada más ni nada
menos que tendrá que rendir visita al actual campeón de Liga y
Champions. El Barcelona de Guardiola que deslumbra al mundo entero y que
es prácticamente intratable cuando juega en el Camp Nou. Sin embargo si hay un equipo capaz de sacar los colores a los blaugranas ese es el Villarreal que de sus once visitas en toda su historia se ha llevado puntos en seis de ellas.
El submarino debutó en el templo barcelonista en la temporada 1998-1999
cuando disputaba su primera temporada en la Primera División en toda su
historia. Ese mismo año el Barça comenzó a descubrir el poder amarillo.
El equipo dirigido por aquel entonces por José Antonio Irulegui se
llevó los tres puntos del Camp Nou por un claro 1-3 donde sobresalió el
rumano Craioveanu que marcó dos goles, siendo para Gerardo el tercero.
Tras un descenso y la vuelta a la élite un año después hubo
que esperar hasta la temporada 2003-2004 para que el conjunto
villarrealense se llevara algo positivo de su visita a Barcelona.
En concreto fue un punto tras el empate a 0 con el nuevo Barça de Frank
Rijkaard en el que no fueron capaces de perforar la portería amarilla
hombres como Ronaldinho, Saviola o Patrick Kluivert.
La siguiente temporada habría un nombre que destacaría por encima del resto. Ese fue el uruguayo Diego Forlán, que propició con tres goles el empate a tres en el Camp Nou. Comenzaron
de manera inmejorable las cosas para el equipo de Pellegrini con un
0-2. Sin embargo el Barça remontó y se puso por encima pero de nuevo
aparecería Forlán para dejar en tablas en marcador y llevarse otro punto
para Vila-real.
Tras un par de derrotas en las
respectivas visitas llegaría la temporada 2007-2008 donde el Villarreal
volvería a llevarse los tres puntos de Barcelona. Se
adelantarían con un gol de Marcos Senna de penalti. Sin embargo el
conjunto de Rijkaard consiguió el empate, pero a falta de diez minutos
para el final aparecería el danés Jon Dahl Tomasson para hacer el
definitivo 1-2 y conseguir una victoria que no se conseguía desde el
primer año en Primera.
Sin embargo sería la temporada 2008-2009 cuando el conjunto villarrealense sería conocido por aguar las fiestas blaugranas.
El equipo de Guardiola llegaba a la jornada 35 con la misión de ganar
para proclamarse en casa campeón de Liga. Keita lograba encarrilar el
partido, pero Joseba Llorente poco después igualaba la contienda. Etoo y
Dani Alves volvían a dar lo que parecía una ventaja definitiva. Sin
embargo Matias Fernández recortaba distancias de penalti y en el tiempo
añadido de nuevo Llorente hacía enmudecer a la grada local que veía como
tenían que esperar para cantar el alirón al volar los tres puntos hacia
la Comunidad Valenciana.
Cuando todavía estaba reciente el recuerdo de la victoria del submarino llegaría un nuevo duelo con una nueva fiesta preparada.
Era el primer partido del año 2010 en el que el conjunto blaugrana
quería festejar los 6 títulos logrados, entre ellos el reciente
Mundialito. A los siete minutos Pedro ponía el delirio en las gradas del
estadio azulgrana con el gol que daba ventaja al Barça, pero tras la
reanudación David Fuster conseguía el definitivo 1-1 amargando de nuevo
la fiesta culé.
En la pasada temporada el Barcelona ganó
contundentemente al conjunto de Garrido por 3-1 con un gol de Villa y
dos de Messi que contrarrestaron el de Nilmar para el Villarreal. El
destino ha querido que el próximo lunes vuelvan a verse las caras con
una celebración culé de por medio. El conjunto de Guardiola celebrará con los suyos la Supercopa de Europa conquistada ante el Oporto y
ahí es donde mejor se desenvuelve el Villarreal que podría de nuevo
arruinarles la fiesta y convertirse así en la verdadera bestia negra
azulgrana.
Pues a ver si la estadistica sigue o falla
complicada del inicio liguero la tendrá el Villarreal. Nada más ni nada
menos que tendrá que rendir visita al actual campeón de Liga y
Champions. El Barcelona de Guardiola que deslumbra al mundo entero y que
es prácticamente intratable cuando juega en el Camp Nou. Sin embargo si hay un equipo capaz de sacar los colores a los blaugranas ese es el Villarreal que de sus once visitas en toda su historia se ha llevado puntos en seis de ellas.
El submarino debutó en el templo barcelonista en la temporada 1998-1999
cuando disputaba su primera temporada en la Primera División en toda su
historia. Ese mismo año el Barça comenzó a descubrir el poder amarillo.
El equipo dirigido por aquel entonces por José Antonio Irulegui se
llevó los tres puntos del Camp Nou por un claro 1-3 donde sobresalió el
rumano Craioveanu que marcó dos goles, siendo para Gerardo el tercero.
Tras un descenso y la vuelta a la élite un año después hubo
que esperar hasta la temporada 2003-2004 para que el conjunto
villarrealense se llevara algo positivo de su visita a Barcelona.
En concreto fue un punto tras el empate a 0 con el nuevo Barça de Frank
Rijkaard en el que no fueron capaces de perforar la portería amarilla
hombres como Ronaldinho, Saviola o Patrick Kluivert.
La siguiente temporada habría un nombre que destacaría por encima del resto. Ese fue el uruguayo Diego Forlán, que propició con tres goles el empate a tres en el Camp Nou. Comenzaron
de manera inmejorable las cosas para el equipo de Pellegrini con un
0-2. Sin embargo el Barça remontó y se puso por encima pero de nuevo
aparecería Forlán para dejar en tablas en marcador y llevarse otro punto
para Vila-real.
Tras un par de derrotas en las
respectivas visitas llegaría la temporada 2007-2008 donde el Villarreal
volvería a llevarse los tres puntos de Barcelona. Se
adelantarían con un gol de Marcos Senna de penalti. Sin embargo el
conjunto de Rijkaard consiguió el empate, pero a falta de diez minutos
para el final aparecería el danés Jon Dahl Tomasson para hacer el
definitivo 1-2 y conseguir una victoria que no se conseguía desde el
primer año en Primera.
Sin embargo sería la temporada 2008-2009 cuando el conjunto villarrealense sería conocido por aguar las fiestas blaugranas.
El equipo de Guardiola llegaba a la jornada 35 con la misión de ganar
para proclamarse en casa campeón de Liga. Keita lograba encarrilar el
partido, pero Joseba Llorente poco después igualaba la contienda. Etoo y
Dani Alves volvían a dar lo que parecía una ventaja definitiva. Sin
embargo Matias Fernández recortaba distancias de penalti y en el tiempo
añadido de nuevo Llorente hacía enmudecer a la grada local que veía como
tenían que esperar para cantar el alirón al volar los tres puntos hacia
la Comunidad Valenciana.
Cuando todavía estaba reciente el recuerdo de la victoria del submarino llegaría un nuevo duelo con una nueva fiesta preparada.
Era el primer partido del año 2010 en el que el conjunto blaugrana
quería festejar los 6 títulos logrados, entre ellos el reciente
Mundialito. A los siete minutos Pedro ponía el delirio en las gradas del
estadio azulgrana con el gol que daba ventaja al Barça, pero tras la
reanudación David Fuster conseguía el definitivo 1-1 amargando de nuevo
la fiesta culé.
En la pasada temporada el Barcelona ganó
contundentemente al conjunto de Garrido por 3-1 con un gol de Villa y
dos de Messi que contrarrestaron el de Nilmar para el Villarreal. El
destino ha querido que el próximo lunes vuelvan a verse las caras con
una celebración culé de por medio. El conjunto de Guardiola celebrará con los suyos la Supercopa de Europa conquistada ante el Oporto y
ahí es donde mejor se desenvuelve el Villarreal que podría de nuevo
arruinarles la fiesta y convertirse así en la verdadera bestia negra
azulgrana.
Pues a ver si la estadistica sigue o falla