Fabriciano González, más conocido como Fabri, es un
histórico del fútbol modesto que tendrá el gran desafío de su vida con
un Granada de Primera, y tiene clara cuál será su receta: "Tres palabras
que nos han funcionado: trabajo, respeto y humildad. El objetivo indiscutible es mantenerse, no se debe pensar en otras cosas, y eso hay que hacerlo a base de humildad, respeto y trabajo. Deben ser nuestras señas de identidad".
El
técnico gallego, que concedió una entrevista al diario Marca, confirmó
que está muy contento con la plantilla que se ha conseguido: "Me
gustaría felicitar al presidente porque sé que ha hecho un esfuerzo
sobrehumano para tratar de buscar a los futbolistas necesarios. No ha
sido fácil, pero creo que ha quedado un equipo bastante equilibrado, con una mezcla de juventud y experiencia. Me parece un grupo que va a competir bien".
A pesar de ser uno de los grandes candidatos para descender, Fabri quiere apostar por el fútbol vistoso y de calidad: "El año pasado el Granada fue el tapado, que estuvo todo el año peleando bajo esas premisas
de respeto, trabajo y humildad, y al final se llevó el gato al agua.
Espero que se repita. Sé que el Granada va a jugar un gran fútbol. Ya lo
jugó el año pasado, porque tras el Barça me atrevo a decir que fue uno
de los que mejor fútbol practicó".
El míster reconoció que el ascenso a Primera supone un gran reto: "El salto es abismal. Las categorías están para algo
y aquí se nota muchísimo. Además de en el fútbol en sí, también en toda
la parafernalia que hay montada alrededor a nivel de medios de
comunicación, de aficionados… Es una categoría que se ve en todos los
rincones del mundo. Más no se puede pedir".
Por último, Fabri
también habló de uno de los temas candentes de actualidad, la
desigualdad en el reparto de los derechos televisivos: "Es totalmente cierto. En otras ligas europeas no hay esas diferencias. El
dinero en el fútbol es poderoso y te acerca a los grandes fichajes,
mientras que los demás no pueden participar de ese pastel".
Declaraciones de buenas intenciones y peloteo al presidente
histórico del fútbol modesto que tendrá el gran desafío de su vida con
un Granada de Primera, y tiene clara cuál será su receta: "Tres palabras
que nos han funcionado: trabajo, respeto y humildad. El objetivo indiscutible es mantenerse, no se debe pensar en otras cosas, y eso hay que hacerlo a base de humildad, respeto y trabajo. Deben ser nuestras señas de identidad".
El
técnico gallego, que concedió una entrevista al diario Marca, confirmó
que está muy contento con la plantilla que se ha conseguido: "Me
gustaría felicitar al presidente porque sé que ha hecho un esfuerzo
sobrehumano para tratar de buscar a los futbolistas necesarios. No ha
sido fácil, pero creo que ha quedado un equipo bastante equilibrado, con una mezcla de juventud y experiencia. Me parece un grupo que va a competir bien".
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A pesar de ser uno de los grandes candidatos para descender, Fabri quiere apostar por el fútbol vistoso y de calidad: "El año pasado el Granada fue el tapado, que estuvo todo el año peleando bajo esas premisas
de respeto, trabajo y humildad, y al final se llevó el gato al agua.
Espero que se repita. Sé que el Granada va a jugar un gran fútbol. Ya lo
jugó el año pasado, porque tras el Barça me atrevo a decir que fue uno
de los que mejor fútbol practicó".
El míster reconoció que el ascenso a Primera supone un gran reto: "El salto es abismal. Las categorías están para algo
y aquí se nota muchísimo. Además de en el fútbol en sí, también en toda
la parafernalia que hay montada alrededor a nivel de medios de
comunicación, de aficionados… Es una categoría que se ve en todos los
rincones del mundo. Más no se puede pedir".
Por último, Fabri
también habló de uno de los temas candentes de actualidad, la
desigualdad en el reparto de los derechos televisivos: "Es totalmente cierto. En otras ligas europeas no hay esas diferencias. El
dinero en el fútbol es poderoso y te acerca a los grandes fichajes,
mientras que los demás no pueden participar de ese pastel".
Declaraciones de buenas intenciones y peloteo al presidente