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Real Sociedad y Athletic de Bilbao
abrían la jornada dominical con un derbi por todo lo alto en un estadio
de Anoeta completamente lleno. Los Leones necesitaban ganar para salir
de la zona baja, mientras que el cuadro Txuri Urdin buscaba la victoria
con el fin de rozar puestos europeos.
Así las cosas, Montanier apostó por el siguiente once inicial: Bravo,
Carlos Martínez, Griezmann, Agirretxe, Xabi Prieto, Demidov, Zurutuza,
Mariga, Illarramendi, De la Bella e Iñigo Martínez.
Bielsa, metido de lleno en el ojo del huracán, formó con la siguiente alineación: Iraizoz; Iraola, Javi Martinez, Amorebieta, Aurtenetxe; De Marcos, Gurpegi, Muniain; Susaeta, Llorente y Gabilondo.
El
encuentro, como era de esperar, comenzó con intensidad y ritmo alto. El
Athletic dio el primer aviso con una doble ocasión. Bravo despejó un
remate de Muniain, pero el balón le cayó a Llorente, que mandó el rechace al palo.
Durante
los minutos siguientes, carencia de ooportunidades, aunque no de
fútbol. Ambos conjuntos ofrecían jugadas interesantes y se asociaban con
calidad. Pese a que falta el último pase y algo de presencia en el área
rival, el choque resultaba atractivo.
Muniain,
que gozó de la primera gran ocasión, firmó también la segunda. Sorteó a
varios rivales y se plantó mano a mano ante Bravo, que evitó el gol con
una gran intrvención.
Parecía que el Athletic estaba negado de cara a portería, pero Llorente apareció y demostró que no se le ha olvidado meter goles. Buen
pase de De Marcos desde la derecha y enorme definición del delantero
rojiblanco, que anotó el 0-1 tras revolverse dentro del área y definir
con el exterior de la pierna derecha.
La Real acusó el golpe y
deambuló por el campo hasta que el árbitro señaló el descanso. El
Athletic, sin embargo, no supo aprovechar el bajón anímico de su rival y
se conformó con mantener la mínima ventaja.
El
guión cambió de manera radical en la reanudación. Los hombres de
Montanier salieron a morder y se llevaron por delante al cuadro de
Bielsa en un primer cuarto de hora espectacular. Zurutuza, con una gran volea, estuvo cerca de empatar. Instantes
después, un centro de Xabi Prieto estuvo a punto de ser rematado por
Griezmann en la frontal del área pequeña. El Athletic aguantaba como
podía.
Pese a todo, la muralla acabó rompiéndose en el minuto
sesenta. Y no fue a balón parado. Tampoco en una jugada de toque. Ni
siquiera en un contragolpe. El 1-1 llegó tras un disparo de Íñigo Martínez... ¡Desde su campo! Que sorprendió a Gorka Iraizoz. El gol del año, sin duda, para igualar un derbi preocioso.
Con
dicho tanto, el choque volvía a empezar. Javi Martínez se retiraba
lesionado y en su lugar entraba San José. Anoeta apretaba y el Athletic
pasaba por sus peores momentos. Griezmann, disparando al palo, y Agirretxe, probando a Gorka, estuvieron cerca de firmar el 2-1.
La imagen que ofrecían ambos equipos nos hacía pensar que la remontada local estaba cerca, pero el fútbol es caprichoso y Llorente muy bueno.
Y es que, cuando mejor estaba la Real, un balón en largo para el
delantero riojano acabó en gol tras un preciso y estético remate
sorprendiendo a los zagueros. 1-2 y veinte minutos para el final. Palo
durísimo para el cuadro de Montanier, que no merecía ir por debajo en el
marcador.
El equipo Txuri Urdin intentó reaccionar,
pero el Athletic, bien colocado y durmiendo el esférico, supo mantener
la ventaja hasta el final del partido. Primera victoria de Bielsa en su retorno a la Liga BBVA. ¡Comienza la resurrección rojiblanca!
Derbi, a una hora estraña pero parece que le sento mejor al Atlethic, que parece que empiezan a enterder a Bielsa.