Están tocados... y casi hundidos. Dani Parejo y Ricardo Costa han comenzado el parón de Liga con la moral triturada. Emery los ha sentenciado en poco más de un mes y ambos, aunque se resisten a rendirse, han asumido que salir en el mes de enero no sería una opción descabellada.
La puntilla a un inicio de temporada en el que han sido carne de grada fue el pasado sábado. Ambos entraron en la prelista de veinte convocados para jugar frente al Granada. Creyeron que se trataba de una oportunidad importante ante un débil rival de recobrar las sensaciones como futbolistas. Pero no fue así. Durante la mañana, Emery los condenó nuevamente a la grada y ese golpe fue muy complicado de asumir para los dos.
Parejo llegó a Valencia con la vitola de ser un futbolista importante, joven y con muchas posibilidades de tener minutos. El problema fue que se le fichó para ser mediocentro creador y él siempre había destacado por jugar más cerca de los delanteros. Al final, Banega y Tino Costa le han adelantado y sus opciones de jugar son mínimas. El madrileño tenía opciones de ir con La Roja a los Juegos Olímpicos, pero si se pasa todo el año en la grada su sueño se desvanecerá.
El ex del Getafe llegó tarde a la pretemporada. El mismo Braulio le mandó un mensaje en su última comparecencia pública y pese a que tuvo su opción en Liga de Campeones -fue titular ante el Genk-, desde ese mismo día desapareció del mapa.
El caso de Ricardo Costa es más doloroso, si cabe. El luso se refugia ahora en el paraguas de Paulo Bento. El seleccionador de Portugal lo ha seguido y ha cumplido con su palabra de llevarle a la absoluta. Costa está enojado. No entiende el trato recibido durante este mes. En verano fue el propio Emery el que le eligió como uno de los capitanes del equipo y ahora le ha arrinconado.
Desde la llegada de Víctor Ruiz, el portugués no ha jugado minuto alguno. Fue titular en el debut ante el Racing de Santander en Mestalla tras una pretemporada prometedora. Pero rápidamente fue fulminado -en el descanso-. Con Ruiz habiéndose entrenado un par de veces, Emery le dio la titularidad. Otro golpe para el luso, que llevaba todo el verano siendo titular.
Los casos de Parejo y Costa han sido los más exagerados del inicio de temporada, pero no los únicos. Jugadores como Aduriz o el mismo Tino Costa están entrando muy poco en los planes del entrenador y cada día pierden confianza en la posibilidad de recuperar el puesto.
Si Dani Parejo y Ricardo Costa han sido olvidados por el técnico vasco, el único de la plantilla del Valencia que no ha jugado minuto alguno es Ángel Dealbert. Quizá por más esperado, el tema del central de Castellón ha pasado más desapercibido, pero lo cierto es que en menos de dos años el defensa ha pasado de ser habitual a no contar en ninguna convocatoria. Acaba contrato el 30 de junio próximo y lo normal es que no continúe.
Bueno aquí en Valencia ya sabíamos que Parejo no cuenta para Emery, el entrenador ya habló con el cuando llegó e incluso lo calificó de jugador de futuro, lo de Ricardo Costa es distinto, hay gente mejor en su posición y ocupa una ficha necesaria para otro puesto, eso no es marginar es ser claro.
La puntilla a un inicio de temporada en el que han sido carne de grada fue el pasado sábado. Ambos entraron en la prelista de veinte convocados para jugar frente al Granada. Creyeron que se trataba de una oportunidad importante ante un débil rival de recobrar las sensaciones como futbolistas. Pero no fue así. Durante la mañana, Emery los condenó nuevamente a la grada y ese golpe fue muy complicado de asumir para los dos.
Parejo llegó a Valencia con la vitola de ser un futbolista importante, joven y con muchas posibilidades de tener minutos. El problema fue que se le fichó para ser mediocentro creador y él siempre había destacado por jugar más cerca de los delanteros. Al final, Banega y Tino Costa le han adelantado y sus opciones de jugar son mínimas. El madrileño tenía opciones de ir con La Roja a los Juegos Olímpicos, pero si se pasa todo el año en la grada su sueño se desvanecerá.
El ex del Getafe llegó tarde a la pretemporada. El mismo Braulio le mandó un mensaje en su última comparecencia pública y pese a que tuvo su opción en Liga de Campeones -fue titular ante el Genk-, desde ese mismo día desapareció del mapa.
El caso de Ricardo Costa es más doloroso, si cabe. El luso se refugia ahora en el paraguas de Paulo Bento. El seleccionador de Portugal lo ha seguido y ha cumplido con su palabra de llevarle a la absoluta. Costa está enojado. No entiende el trato recibido durante este mes. En verano fue el propio Emery el que le eligió como uno de los capitanes del equipo y ahora le ha arrinconado.
Desde la llegada de Víctor Ruiz, el portugués no ha jugado minuto alguno. Fue titular en el debut ante el Racing de Santander en Mestalla tras una pretemporada prometedora. Pero rápidamente fue fulminado -en el descanso-. Con Ruiz habiéndose entrenado un par de veces, Emery le dio la titularidad. Otro golpe para el luso, que llevaba todo el verano siendo titular.
Los casos de Parejo y Costa han sido los más exagerados del inicio de temporada, pero no los únicos. Jugadores como Aduriz o el mismo Tino Costa están entrando muy poco en los planes del entrenador y cada día pierden confianza en la posibilidad de recuperar el puesto.
Si Dani Parejo y Ricardo Costa han sido olvidados por el técnico vasco, el único de la plantilla del Valencia que no ha jugado minuto alguno es Ángel Dealbert. Quizá por más esperado, el tema del central de Castellón ha pasado más desapercibido, pero lo cierto es que en menos de dos años el defensa ha pasado de ser habitual a no contar en ninguna convocatoria. Acaba contrato el 30 de junio próximo y lo normal es que no continúe.
Bueno aquí en Valencia ya sabíamos que Parejo no cuenta para Emery, el entrenador ya habló con el cuando llegó e incluso lo calificó de jugador de futuro, lo de Ricardo Costa es distinto, hay gente mejor en su posición y ocupa una ficha necesaria para otro puesto, eso no es marginar es ser claro.