La casa italiana afrontaba el nuevo año con el sinsabor de perder un campeonato en la última carrera de 2010. La vendetta no pudo completarse este año, y Ferrari tuvo que conformarse con ser la tercera escudería más poderosa del campeonato. Fernando Alonso volvió a mostrar su superioridad sobre Felipe Massa, algo que no es suficiente para aun piloto que aspira a todo.
Ferrari llegaba con la rabia y el ánimo de venganza de 2010. Una desafortunada decisión estratégica y un ruso llamado Petrov ya archiconocido entre la afición alonsista, privaron a la casa italiana de un nuevo título mundial de pilotos, que hubiera recaído sobre un Alonso que había rodado al límite de sus posibilidades hasta Abu Dabi. La necesidad de "cambiar el chip" y de volver a ser la escudería número uno en 2011 era un presión casi inaguantable para Domenicalli y los suyos; sin embargo la fábrica de Maranello trabajó noche y día para llegar en la mejor forma posible y con el mejor coche a Australia. El jarro de agua fría noLas mejoras en el coche nunca llegaron de la forma deseada se haría esperar, en nuestras antípodas Fernando Alonso se quedó fuera del podio, y Massa fue séptimo. Este primer fracaso dejó una herida que solo se podría curar con mejoras en el coche.
Unas mejoras que nunca llegaron, o al menos no lo hicieron de la manera deseada. La escudería más laureada de la fórmula uno fue incapaz de desarrollar un coche competitivo, y era humillada carrera tras carrera por un alemán llamado Vettel, a lomos de la mejor máquina de carreras jamás fabricada.
El famoso dedo de Vettel mostrado tras cada victoria del "rubio de oro" era una puñalada profunda al rojo corazón los italianos. Un corazón que ya había dejado de latir a mitad de temporada, cuando el realismo se instauró en Maranello para demostrar que pensar en 2012 era la mejor opción.
Fernando Alonso, abonado al quinto puesto
Sin duda alguna, el quinto puesto tendrá un sabor especial para Alonso en las temporadas venideras. Y no precisamente un sabor agradable. El asturiano estuvo abonado durante todo el año al quinto puesto en la calificación, siendo incapaz de batir a los Red Bull y McLaren, y esperando siempre un fallo de estos o un milagro para auparse en posiciones más adelantadas.
Fue una constante ver cómo el de Ferrari aprovechaba su cualidades como piloto en la salida para ganar alguna posición, Alonso calificó mejor que Massa en quince ocasiones incluso para colocarse primero como ocurrió en el GP de Catalunya, sin embargo el Red Bull de Vettel no tardaba en dejarle claro que la primera plaza era solo una ilusión. La superioridad del asturiano sobre su compañero de equipo quedaba patente ya en dicha sesión, y es que Alonso clasificó mejor que Massa en 15 ocasiones, siendo tan solo 4 las veces en las que el brasileño le ganó la partida a su compañero.
El año de Massa ha sido realmente malo, lo suficiente para que muchos aficionados sean incapaces de comprender la razón de la continuidad en una escudería como Ferrari.
Fernando Alonso, abonado al quinto puesto
Sin duda alguna, el quinto puesto tendrá un sabor especial para Alonso en las temporadas venideras. Y no precisamente un sabor agradable. El asturiano estuvo abonado durante todo el año al quinto puesto en la calificación, siendo incapaz de batir a los Red Bull y McLaren, y esperando siempre un fallo de estos o un milagro para auparse en posiciones más adelantadas.
Fue una constante ver cómo el de Ferrari aprovechaba su cualidades como piloto en la salida para ganar alguna posición, Alonso calificó mejor que Massa en quince ocasiones incluso para colocarse primero como ocurrió en el GP de Catalunya, sin embargo el Red Bull de Vettel no tardaba en dejarle claro que la primera plaza era solo una ilusión. La superioridad del asturiano sobre su compañero de equipo quedaba patente ya en dicha sesión, y es que Alonso clasificó mejor que Massa en 15 ocasiones, siendo tan solo 4 las veces en las que el brasileño le ganó la partida a su compañero.
El año de Massa ha sido realmente malo, lo suficiente para que muchos aficionados sean incapaces de comprender la razón de la continuidad en una escudería como Ferrari.
Desde Ferrari se quejen de Otra Desilusión está Temporáda,pues Nada a esperar para la Temporáda que Viene y a la Tercera será la Vencída.
Ferrari llegaba con la rabia y el ánimo de venganza de 2010. Una desafortunada decisión estratégica y un ruso llamado Petrov ya archiconocido entre la afición alonsista, privaron a la casa italiana de un nuevo título mundial de pilotos, que hubiera recaído sobre un Alonso que había rodado al límite de sus posibilidades hasta Abu Dabi. La necesidad de "cambiar el chip" y de volver a ser la escudería número uno en 2011 era un presión casi inaguantable para Domenicalli y los suyos; sin embargo la fábrica de Maranello trabajó noche y día para llegar en la mejor forma posible y con el mejor coche a Australia. El jarro de agua fría noLas mejoras en el coche nunca llegaron de la forma deseada se haría esperar, en nuestras antípodas Fernando Alonso se quedó fuera del podio, y Massa fue séptimo. Este primer fracaso dejó una herida que solo se podría curar con mejoras en el coche.
Unas mejoras que nunca llegaron, o al menos no lo hicieron de la manera deseada. La escudería más laureada de la fórmula uno fue incapaz de desarrollar un coche competitivo, y era humillada carrera tras carrera por un alemán llamado Vettel, a lomos de la mejor máquina de carreras jamás fabricada.
El famoso dedo de Vettel mostrado tras cada victoria del "rubio de oro" era una puñalada profunda al rojo corazón los italianos. Un corazón que ya había dejado de latir a mitad de temporada, cuando el realismo se instauró en Maranello para demostrar que pensar en 2012 era la mejor opción.
Fernando Alonso, abonado al quinto puesto
Sin duda alguna, el quinto puesto tendrá un sabor especial para Alonso en las temporadas venideras. Y no precisamente un sabor agradable. El asturiano estuvo abonado durante todo el año al quinto puesto en la calificación, siendo incapaz de batir a los Red Bull y McLaren, y esperando siempre un fallo de estos o un milagro para auparse en posiciones más adelantadas.
Fue una constante ver cómo el de Ferrari aprovechaba su cualidades como piloto en la salida para ganar alguna posición, Alonso calificó mejor que Massa en quince ocasiones incluso para colocarse primero como ocurrió en el GP de Catalunya, sin embargo el Red Bull de Vettel no tardaba en dejarle claro que la primera plaza era solo una ilusión. La superioridad del asturiano sobre su compañero de equipo quedaba patente ya en dicha sesión, y es que Alonso clasificó mejor que Massa en 15 ocasiones, siendo tan solo 4 las veces en las que el brasileño le ganó la partida a su compañero.
El año de Massa ha sido realmente malo, lo suficiente para que muchos aficionados sean incapaces de comprender la razón de la continuidad en una escudería como Ferrari.
Fernando Alonso, abonado al quinto puesto
Sin duda alguna, el quinto puesto tendrá un sabor especial para Alonso en las temporadas venideras. Y no precisamente un sabor agradable. El asturiano estuvo abonado durante todo el año al quinto puesto en la calificación, siendo incapaz de batir a los Red Bull y McLaren, y esperando siempre un fallo de estos o un milagro para auparse en posiciones más adelantadas.
Fue una constante ver cómo el de Ferrari aprovechaba su cualidades como piloto en la salida para ganar alguna posición, Alonso calificó mejor que Massa en quince ocasiones incluso para colocarse primero como ocurrió en el GP de Catalunya, sin embargo el Red Bull de Vettel no tardaba en dejarle claro que la primera plaza era solo una ilusión. La superioridad del asturiano sobre su compañero de equipo quedaba patente ya en dicha sesión, y es que Alonso clasificó mejor que Massa en 15 ocasiones, siendo tan solo 4 las veces en las que el brasileño le ganó la partida a su compañero.
El año de Massa ha sido realmente malo, lo suficiente para que muchos aficionados sean incapaces de comprender la razón de la continuidad en una escudería como Ferrari.
Desde Ferrari se quejen de Otra Desilusión está Temporáda,pues Nada a esperar para la Temporáda que Viene y a la Tercera será la Vencída.