“El vestuario está triste y tranquilo”, ha confesado José Mourinho en la sala de prensa del Santiago Bernabéu, después de su octava derrota ante el Barcelona. “Había dicho antes del partido que estábamos muy equilibrados emocionalmente, y que ni una victoria que nos dejaría a seis puntos, ni una derrota que nos dejaría iguales nos desequilibraría emocionalmente. Obviamente si ganas estás feliz, pero estamos equilibrados. Nos queda un partido sin jugar y si no lo perdemos llegaremos a las pequeñas vacaciones de Navidad líderes”, se consoló el técnico.
Cuando ya moría el encuentro, Mourinho se ha acercado a un viejo conocido, Tito Vilanova, al que ha “deseado salud”. Sobre la jugada más polémica del partido, la de la posible expulsión de Leo Messi, no ha querido criticarlo: “Me ha parecido expulsión, a lo mejor no es. El árbitro ve mejor que yo, porque yo estoy a 50 metros, y no quiero hacer ninguna crítica sin verlo por televisión y ser injusto”.
En un análisis más general de la derrota, ha destacado que “ha sido consecuencia de lo que es el fútbol, que es un juego. Detalles y la suerte juega una parte importante. Tuvimos el dos a cero y en circunstancias normales lo hacemos y cozn ese resultado el partido seria diferente. El primer tiempo equilibrado y el segundo gol es pura suerte. No es ni talento ni fallo. Luego tuvimos el dos a dos y después ellos han tenido una supremacia psicológica. Con el tres a uno se quedaron tranquilos. Sin querer quitar mérito aquien ha ganado, la suerte ha hecho un poco la diferencia. Es un juego y nada más”.
Finalmente no sacó el trivote, sino a Özil, y le lanzó una ligera crítica al alemán. “No puse trivote porque jugamos en casa y queríamos ser más ofensivos, y queríamos ganar, esperaba mejor rendimiento de Ozil en nuestra casa”. Mourinho ha querido salir a la sala de prensa, simplemente, porque el equipo ha perdido. “No creais que iba a dejar salir a Aitor (Karanka) después de perder. Si el equipo gana y tengo una rueda de prensa normal, donde no hay que dar la cara y representar al perdedor, vale. Pero después de una derrota no”.
La parte más crítica ha sido en cuanto se ha referido al primer gol que recibieron, porque no es el primero que les hacen así. “No me ha gustado el primer gol, porque hemos recibido muchos así.Un jugador mío en el balón dividido no estuvo bien y a partir de ahí se desarrollo una jugada. Entiendo que los jugadores tengan miedo porque se acuerdan de partidos anteriores en los que veían tarjeta por meter la pierna en el medio campo”, se ha quejado.
Mourinho, en definitiva, no es pesimista, pese a que no sabe lo que es ganar al Barcelona. “Por los números ellos han ganado más partidos que nosotros, y de modo pragmático es más fácil de analizar. Quien gana más partidos ha sido mejor que su adversario, por lo que de modo pragmático tienes toda la razón. Luego nos olvidamos de porqué ha sido, de la expulsión de Pepe, el gol de Higuaín… Pero el partido que les ganamos fue una final y para mi fue más importante que este, porque se decide ahí. Por eso si tengo que elegir un partido que ganar escojo ese, porque te da un título. Pero tengo que estar de acuerdo con usted, nos han ganado más partidos”, ha dicho. “No estoy de acuerdo en que la clave fuera el centro del campo del Barcelona. Tuvimos problemas en los úiltimos metros y en los últimos minutos, cuando el Barça se asentó, pero en la primera parte no tuvimos problemas como en la segunda parte. Ellos pudieron trabajar desde atrás porque la presión no fue la misma”, dejó al final.
También esperaba más de Ozil, CR7...