Lavaron los trapos sucios y apagaron el incendio de El Arcángel.
Tras un día y medio de enorme tensión después de la derrota en Córdoba, Pepe Mel y sus jugadores tuvieron ayer una nueva charla muy extensa en la que se expusieron los divergentes puntos de vista. El técnico no se arrepiente de sus palabras y la plantilla defendió su entrega por el grupo, pero todos decidieron dar por finalizado el altercado y pensar con los cinco sentidos en el importante partido del domingo contra el Atlético. De hecho, el propio Jorge Molina, que fue el jugador que respondió en público al entrenador el pasado miércoles, reculó a través de Twitter. "Lo mejor de este equipo es la unión, tanto cuerpo técnico como jugadores, y eso no lo vamos a perder", dijo el delantero.
Ciertamente, los componentes de la plantilla esperan que el cruce de declaraciones entre técnico y jugadores no deje secuelas y así lo expusieron ya ayer en público. "Lo de Molina fue un malentendido, no quiso echar mierda al entrenador. El vestuario está muy unido y lleva así mucho tiempo. Yo he llegado nuevo y lo he podido comprobar. No va a cambiar por unas palabras o un mal partido. El técnico nos habló a la cara y todos nos damos por aludidos", dijo Matilla.
El domingo sólo van a repetir dos titulares
El máximo hincapié de la plantilla es que no se produzcan divisiones entre titulares y suplentes, aunque tras el último partido parece que van a existir más que nunca. De hecho, Mel tiene previsto un once inicial para el domingo en el que sólo repetirán Juanma y Ustaritz.
hay que hacer las paces y mas aún en un equipo