El Levante cerró la Liga con una goleada en un partido en el que, aunque
el equipo vasco tuvo más el balón, dispuso de más ocasiones y ganó con
justicia en el último encuentro de la mejor Liga de su historia, en la
que encontró un buen premio a una gran temporada.
El primer tiempo fue muy intenso, con un Athletic Club como
dominador del juego ante un Levante que, como es habitual en él, buscaba
el contragolpe para hacer daño a su rival.
Se jugaba muy cerca del área de Keylor Navas, sustituto hoy del
sancionado Munúa, pero el Athletic no fue capaz de crear ocasiones
claras de gol.
Altura del césped
El Levante, por su parte,
se encontró con un gran enemigo en sus contragolpes, la altura del
césped, que impedía completar las salidas del equipo con la rapidez
habitual en sus atacantes.
Muchas contras se frustraron en el penúltimo pase y las que
acabaron con remate, no encontraron la puerta de un Athletic que, en
líneas generales, defendía con comodidad.
Todo cambió en el último minuto del primer tiempo, cuando un
excepcional pase de Cabral desde su línea defensiva permitió que Ghezzal
batiera en vaselina a Iraizoz y pusiera el 1-0 en el marcador en la
acción que cerró el primer periodo.
El técnico del Athletic, Marcelo Bielsa, no daba por bueno el
resultado al descanso y dio entrada a dos de sus 'pesos pesados', Javi
Martínez y Fernando Llorente, en sustitución de Iturraspe y Toquero.
El Levante no estaba incómodo, pero en el minuto 57 Llorente dio
la primera señal de su presencia en el campo con un gran cabezazo que
Keylor Navas desvió a córner en la primera ocasión de gol del conjunto
vasco, aunque Botelho, casi de inmediato, pudo poner el 2-0 en el
marcador a pase de Barkero.
En la siguiente opción de gol, justo en el ecuador del segundo
tiempo, una acción de Barkero propició el 2-0 en un nuevo remate de
Ghezzal.
Con este marcador, la afición empezó a saborear la victoria,
mientras que el Athletic mantenía el la posesión del balón, pero casi
siempre lejos de la meta del costarricense Navas.
En una contra, Valdo pudo hacer el 3-0 ante un rival que
manejaba el balón, pero al que le faltaba intensidad, ante un Levante
que jugó con inteligencia los minutos finales.
El partido acabó con una fiesta, sobre todo tras el gol de
penalti marcado por Farinós a dos minutos del final del encuentro, que
convirtió en goleada un partido que acabó con invasión del terreno de
juego por parte de los aficionados locales para festejar el éxito de su
equipo.
Dos goles de Ghezzal y uno de penalti de Farinós metieron al Levante por
primera vez en su historia en competición europea, tras un partido en
el que el equipo valenciano aprovechó sus armas habituales a la contra
ante un Athletic con poca tensión (3-0).
el equipo vasco tuvo más el balón, dispuso de más ocasiones y ganó con
justicia en el último encuentro de la mejor Liga de su historia, en la
que encontró un buen premio a una gran temporada.
El primer tiempo fue muy intenso, con un Athletic Club como
dominador del juego ante un Levante que, como es habitual en él, buscaba
el contragolpe para hacer daño a su rival.
Se jugaba muy cerca del área de Keylor Navas, sustituto hoy del
sancionado Munúa, pero el Athletic no fue capaz de crear ocasiones
claras de gol.
Altura del césped
El Levante, por su parte,
se encontró con un gran enemigo en sus contragolpes, la altura del
césped, que impedía completar las salidas del equipo con la rapidez
habitual en sus atacantes.
Muchas contras se frustraron en el penúltimo pase y las que
acabaron con remate, no encontraron la puerta de un Athletic que, en
líneas generales, defendía con comodidad.
Todo cambió en el último minuto del primer tiempo, cuando un
excepcional pase de Cabral desde su línea defensiva permitió que Ghezzal
batiera en vaselina a Iraizoz y pusiera el 1-0 en el marcador en la
acción que cerró el primer periodo.
El técnico del Athletic, Marcelo Bielsa, no daba por bueno el
resultado al descanso y dio entrada a dos de sus 'pesos pesados', Javi
Martínez y Fernando Llorente, en sustitución de Iturraspe y Toquero.
El Levante no estaba incómodo, pero en el minuto 57 Llorente dio
la primera señal de su presencia en el campo con un gran cabezazo que
Keylor Navas desvió a córner en la primera ocasión de gol del conjunto
vasco, aunque Botelho, casi de inmediato, pudo poner el 2-0 en el
marcador a pase de Barkero.
En la siguiente opción de gol, justo en el ecuador del segundo
tiempo, una acción de Barkero propició el 2-0 en un nuevo remate de
Ghezzal.
Con este marcador, la afición empezó a saborear la victoria,
mientras que el Athletic mantenía el la posesión del balón, pero casi
siempre lejos de la meta del costarricense Navas.
En una contra, Valdo pudo hacer el 3-0 ante un rival que
manejaba el balón, pero al que le faltaba intensidad, ante un Levante
que jugó con inteligencia los minutos finales.
El partido acabó con una fiesta, sobre todo tras el gol de
penalti marcado por Farinós a dos minutos del final del encuentro, que
convirtió en goleada un partido que acabó con invasión del terreno de
juego por parte de los aficionados locales para festejar el éxito de su
equipo.
Dos goles de Ghezzal y uno de penalti de Farinós metieron al Levante por
primera vez en su historia en competición europea, tras un partido en
el que el equipo valenciano aprovechó sus armas habituales a la contra
ante un Athletic con poca tensión (3-0).