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GOAL.com/Antara
En una época muy mala desde el punto de vista económico, los clubes
de fútbol agudizan el ingenio para seguir contando con los ingresos que
les permitan tener plantillas competitivas. Pese a que en algunos casos
demuestran que no es oro todo lo que reluce (véase la actual situación
del Málaga o anteriormene la sufrida por el Racing de Santander), los
equipos siguen estando tentados por los petrodólares.
El último en sumarse a esta moda ha sido el Valencia, que en su
reciente gira por Indonesia ha contado con el multimillonario Hary
Taroesoedibjo, que ha sido el encargado de pagar el amistoso ante la
selección y la estancia de los chés.
El magnate, cuya fortuna está
valorada en unos cinco mil millones de dólares y que aspira a ser
presidente de la República a largo plazo y a medio le seduce la idea de
invertir algo de su fortuna, valorada en cinco mil millones de dólares,
en el fútbol. Y el conjunto ché no ha tardado en posicionarse.
Por
el momento, ya tiene una oferta para volver el próximo verano a
Indonesia. Ésta vez a la ciudad de Surabaya, la segunda más grande tras
Yakarta. En esta ocasión el club se ha embolsado en torno a 500.000
euros de manera directa, pero además ha conseguido una importante
repercusión en un país cuyo crecimiento económico (6% anual) es sólo
superado por China. Veremos si esto es el comienzo de una larga y
prolífica amistad.
Yo no me fiaria de multimillonarios
