Mientras
la británica Jessica Ennis hacia historia ante su público con una
prueba de heptatlón memorable (6955 puntos), una atleta mucho más
modesta se convertía en el inesperado centro de atención de la prueba.
Se trata de la checa Eliska Klucinova, que con 24 años acabó la prueba combinada femenina en 18ª posición; pero desde luego eso no fue lo que centró la atención de las cámaras.
En un punto de la competición, Eliska necesitaba ponerse las mallas, y
por tanto, quitarse las bragas. Valiéndose de una toalla para no
mostrar al mundo sus partes pudorosas, se puso manos a la obra.
Una operación habitual en los estadios que en esta ocasión tuvo algo
de extraordinario: Una cámara centró su atención en el cambio de atuendo
de la atleta, que no tardó en darse cuenta de que estaba siendo
grabada.
Con una sonrisa en los labios y una gran destreza, Klucinova continúo
con su proceso sin exhibir un gramo de carne más de lo necesario. En
apenas unos segundos tenía las bragas en la mano y las mallas puestas. Y
lista para seguir compitiendo.
es.eurosport.yahoo.com
Mira que debe haber vestuarios y van a cambiarse en medio de un estadio
la británica Jessica Ennis hacia historia ante su público con una
prueba de heptatlón memorable (6955 puntos), una atleta mucho más
modesta se convertía en el inesperado centro de atención de la prueba.
Se trata de la checa Eliska Klucinova, que con 24 años acabó la prueba combinada femenina en 18ª posición; pero desde luego eso no fue lo que centró la atención de las cámaras.
En un punto de la competición, Eliska necesitaba ponerse las mallas, y
por tanto, quitarse las bragas. Valiéndose de una toalla para no
mostrar al mundo sus partes pudorosas, se puso manos a la obra.
Una operación habitual en los estadios que en esta ocasión tuvo algo
de extraordinario: Una cámara centró su atención en el cambio de atuendo
de la atleta, que no tardó en darse cuenta de que estaba siendo
grabada.
Con una sonrisa en los labios y una gran destreza, Klucinova continúo
con su proceso sin exhibir un gramo de carne más de lo necesario. En
apenas unos segundos tenía las bragas en la mano y las mallas puestas. Y
lista para seguir compitiendo.
es.eurosport.yahoo.com
Mira que debe haber vestuarios y van a cambiarse en medio de un estadio