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El Zaragoza se quedó sin la cesión de Andreu Fontàs por apurar demasiado en el tiempo, tal y como anuncia Mundo Deportivo.
El miércoles 29, el Barça recibió la noticia por parte del Málaga de
que no negociaría la cesión de Fontàs. Hasta ese momento era la
principal opción manejada por el club culé, pues era una situación ideal
para un jugador que necesita minutos y aclimatarse a la presión de la
competición europea
Durante el día 30, Liverpool y Galatasary, dos de los equipos que
también habían preguntado, se retiraron, quedando así el equipo de
Manolo Jiménez como único candidato.
El club culé y su jugador proponían una cesión por una temporada sin
opción de compra y con la condición de que en Zaragoza se hiciesen cargo
de un porcentaje de la ficha. Además, se establecía la posibilidad de
que en caso de ser necesario, en el mercado invernal, el Barça tendría
libertad para negociar con derecho de tanteo para el club aragonés.
Desde ese momento las conversaciones pararon. El entorno del jugador
trató de contactar sin éxito con directivos del club maño. Nadie en
Zaragoza atendía a las llamadas, y según las versiones dadas desde la
Ciudad Condal, no es hasta media hora antes del cierre del periodo de
fichajes cuando suena el móvil.
En Zaragoza sostienen que Fontàs no era la primera opción y que, en todo caso, Manolo Jiménez le quería como pivote.
El club maño decidió irse a por el central catalán poco antes de las 00:00 h de la noche, acción que desesperó al Barça
