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Alineación sorpresiva fue la que presentó Tito Vilanova para el
encuentro ante el Benfica y es que con la clasificación ya asegurada
como líder, lo único que se jugaban los blaugranas era el honor y claro,
una ganancia económica por sacar los 3 puntos.
Lionel Messi
comenzó de suplente para sorpresa de todos y la delantera quedó a cargo
de Tello, Rafinha y David Villa. Con apenas seis minutos de iniciado el
encuentro, una espléndida jugada entre Adriano y Villa, en la que el
brasileño hizo regates al más puro estilo Messi, terminó con un balón
sin tocar la malla para después y en dos ocasiones consecutivas el
delantero asturiano perder dos buenas oportunidades por claros fuera de
lugar.
Los lisboetas supieron incomodar a los azulgranas al inicio del
encuentro y tuvieron su primera oportunidad con un contragolpe y en el
remate, Rodrigo desaprovechó la jugada con la que los de Jorge Jesús
pudieron haber abierto el marcador. Después llegó una oportunidad, esta
vez de Lima que de 'palomita' remató en la portería de Pinto, pero una
vez los del país vecino acusaban la falta de portería.
Los
blaugranas respondieron con dos jugadas no menos lejanas a lo que ya
hacían las 'Aguilas' del Benfica y Cristian Tello con una oportunidad de
oro, dejó escapar el gol con un remate muy desviado en la portería de
Artur. El Camp Nou resentía por momentos la inexperiencia de Carles
Planas y también la falta de convencimiento que a veces llega cuando
Alex Song pierde balones importantes. Puyol por su parte, tuvo que
retrasar su posición para ayudar a Pinto en las labores y Adriano con su
rapidez se encargaba de desviar los balones que se acercaban.
Por
un instante la helada noche desapareció cuando Lima remató raso y el
esférico dio en el palo y en el rebote fue Planas quien logró salvar ese
balón que sin duda iba al fondo del arco blaugrana. Por varios minutos
el encuentro empezó a disputarse en el área del Barça, los lisboetas con
gran presión llegaron por momentos encerrar a los blaugranas y la
defensa concedía demasiado. A pesar de que los culés tenían el 60% de la
posesión del balón, las peligrosas llegadas del Benfica eran
protagonistas.
Tello no tenía su mejor noche y David Villa no se
encontraba con el gol. Los aplausos volvieron al estadio azulgrana
cuando se anunció la entrada de Messi en la segunda parte, el argentino
sustituía a Rafinha. Apenas el argentino pisaba el césped y Luisao
cometía una dura falta sobre 'la pulga' y ademñas de llevarse una
tarjeta amarilla por parte del árbitro, también debió soportar una dura
reprimenda de Puyol.
Pinto era sin duda el salvador de los
azulgranas en más de una ocasión desvió los ataques que iban directo a
gol de los lusos. Gerard Piqué sustituyó a un buen Adriano. El juego del
Barça estuvo desangelado, Leo cambió el ritmo del encuentro pero no era
suficiente, con grandes faltas de precisión. Se echaba de menos a Xavi a
Iniesta y al buen fútbol de los culés. Deulofeu sustituyó a Cristian
Tell.
Messi fue coreado en el Camp Nou. No hizo gol a pesar de
que el rosarino tuvo una gran oportunidad que fue fraguada en gran parte
por la dura entrada del portero Artur, que dejó tendido al delantero
del Barça por varios minutos y la angustia aumentó cuando la camilla
entró al terreno de juego y se llevó al gran Leo lesionado.
Esta noche no hubo gol, no hubo récord y Messi se lastimó.
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