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El Valencia regresa a París para jugar un partido de Champions. La anterior visita fue en mayo de 2000 cuando disputaron la final de la máxima competición continental ante el Real Madrid, si bien en aquella ocasión era el Stade De France el recinto donde se jugó el choque que supuso la derrota del equipo ché. Ahora, 13 años después, el equipo valencianista vuelve a la "ciudad de la luz" en busca del pase a cuartos de final, en busca de una gesta en el Parque de los Príncipes.
Es cierto que el resultado de Mestalla no invita al optimismo y ni siquiera los precedentes parecen servir de apoy, ya que ningún equipo ha levantado un 1-2 en Liga de Campeones o el propio club nunca ha superado una eliminatoria tras perder en casa, pero siempre hay razones para creer y datos que arropan a los hombres de Ernesto Valverde en su proeza, por ejemplo el Valencia nunca ha perdido en sus ocho partidos anteriores ante equipos franceses. Una mirada al pasado que permite sonreír.
Para este partido los blanquinegros tendrán las bajas de Rami y Ricardo Costa lo que obligará a presentar una defensa alternativa con Víctor Ruíz y Matthieu como centrales. Un dato preocupante que queda aliviado por las ausencias significativas en el lado local, que afectan a todas las líneas y demarcaciones: los lesionados son Thiago Silva, Motta y Jallet, mientras que están sancionados Verratti e Ibrahimovic. Otro punto de fe para el Valencia.
La escuadra de Carlo Ancelotti llega a este duelo algo tocado tras caer ante el Stade de Reims en Liga -segunda derrota en los últimos cuatro encuentros- , lo que ha facilitado acortar la distancia a sus perseguidores, tanto el Olympique de Lyon como el Olympique de Marsella, pero quizás es anímicamente donde llega afectado debido a las innecesarias declaraciones de Leonardo cargadas de suficiencia y de un punto de presión hacia sus jugadores para sacar obligatoriamente esta eliminatoria, sin margen de error. Otra faceta que podría jugar a favor de los blanquinegros.
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La escuadra de Carlo Ancelotti llega a este duelo algo tocado tras caer ante el Stade de Reims en Liga -segunda derrota en los últimos cuatro encuentros- , lo que ha facilitado acortar la distancia a sus perseguidores, tanto el Olympique de Lyon como el Olympique de Marsella, pero quizás es anímicamente donde llega afectado debido a las innecesarias declaraciones de Leonardo cargadas de suficiencia y de un punto de presión hacia sus jugadores para sacar obligatoriamente esta eliminatoria, sin margen de error. Otra faceta que podría jugar a favor de los blanquinegros.
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