Nada más saltar los jugadores al terreno de juego, con el himno de fondo, los aficionados asistentes al Camp Nou desplegaron un espectacular mosaico formado por 98.000 cartulinas en el que se podía leer 'Força Tito' (Ánimo Tito).
El dibujo, con los colores del club y de la senyera, estaba dedicado a Tito Vilanova, que se vio obligado a dejar el cargo de entrenador del Barça el pasado mes de julio para seguir con el tratamiento contra el cáncer que se le detectó dos años atrás.
El Camp Nou, con una tradición de más de 20 años de mosaicos, ofreció de este modo un gran reconocimiento al técnico que llevó al Barça a su récord de puntos en la Liga, la pasada temporada
bonito detalle por parte del barça
El dibujo, con los colores del club y de la senyera, estaba dedicado a Tito Vilanova, que se vio obligado a dejar el cargo de entrenador del Barça el pasado mes de julio para seguir con el tratamiento contra el cáncer que se le detectó dos años atrás.
El Camp Nou, con una tradición de más de 20 años de mosaicos, ofreció de este modo un gran reconocimiento al técnico que llevó al Barça a su récord de puntos en la Liga, la pasada temporada
bonito detalle por parte del barça