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Como titulaba el diario italiano La Gazzetta dello Sport, era un partido de la Liga BBVA en vez de Serie A, el partido de los españoles. Jugaban de inicio por parte local Joaquín y la indiscutible brújula viola Borja Valero. Del lado azzurri los habituales titulares Reina, Albiol y Callejón. Cinco españoles para el gran encuentro entre quinto y segundo clasificado del Calcio.
Se santiguó once veces Gonzalo Higuaín para iniciar el partido en el Artemio Franchi entre Fiorentina y Nápoles. Mario Gómez, ausente por lesión, vio el partido desde la grada al igual que el gran Arrigo Sacchi.
Comenzaba bien la Fiorentina poseyendo la posesión y teniendo las primeras ocasiones de gol a través de las incorporaciones por banda, tanto por la izquierda con Joaquín como por la derecha con el colombiano Juan Cuadrado. Sorprendió el Nápoles poniéndose por delante del marcador a los diez minutos de partido con un gran gol de José Callejón. Asistiría Higuaín en un centro bien medido desde el borde del área para que el granadino sentenciara de bolea en la portería de Neto.
El equipo de Vincenzo Montella respondió rápido para meterse de nuevo en el partido con un penalti provocado por Fernández que marcaría, quién si no, Giuseppe Rossi, el máximo goleador de la liga italiana. La ilusión por la remontada se desmoronó casi al borde del descanso viendo como el belga Mertens, junto a Higuaín, asistente por partida doble, le tiraba una pared para que impusiese el 1-2 a favor de los napolitanos.
El control de balón y su salida por parte del Nápoles es preocupante. Los goles llegaron en las dos únicas ocasiones que gozaron en la primera parte. La presencia de un centrocampista creador era necesaria y por ello salió Hamsik sustituyendo a Higuaín. El esloveno había comenzado en el banquillo debido a las ya conocidas rotaciones de Rafa Benítez.
El Nápoles mató el partido encerrándose atrás sin dar apenas oportunidad a la remontada de la Fiorentina. Se le abrieron las puertas a diez minutos del final con la expulsión del carrilero Maggio por roja directa pero no lo aprovechó. Cuadrado fue también expulsado por segunda amarilla, ambas por fingir dos penaltis donde el árbitro erró en el último de la expulsión. Un encuentro con una entretenida y emocionante primera mitad eclipsada por la aburrida segunda.Fuente goal.com
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Se santiguó once veces Gonzalo Higuaín para iniciar el partido en el Artemio Franchi entre Fiorentina y Nápoles. Mario Gómez, ausente por lesión, vio el partido desde la grada al igual que el gran Arrigo Sacchi.
Comenzaba bien la Fiorentina poseyendo la posesión y teniendo las primeras ocasiones de gol a través de las incorporaciones por banda, tanto por la izquierda con Joaquín como por la derecha con el colombiano Juan Cuadrado. Sorprendió el Nápoles poniéndose por delante del marcador a los diez minutos de partido con un gran gol de José Callejón. Asistiría Higuaín en un centro bien medido desde el borde del área para que el granadino sentenciara de bolea en la portería de Neto.
El equipo de Vincenzo Montella respondió rápido para meterse de nuevo en el partido con un penalti provocado por Fernández que marcaría, quién si no, Giuseppe Rossi, el máximo goleador de la liga italiana. La ilusión por la remontada se desmoronó casi al borde del descanso viendo como el belga Mertens, junto a Higuaín, asistente por partida doble, le tiraba una pared para que impusiese el 1-2 a favor de los napolitanos.
El control de balón y su salida por parte del Nápoles es preocupante. Los goles llegaron en las dos únicas ocasiones que gozaron en la primera parte. La presencia de un centrocampista creador era necesaria y por ello salió Hamsik sustituyendo a Higuaín. El esloveno había comenzado en el banquillo debido a las ya conocidas rotaciones de Rafa Benítez.
El Nápoles mató el partido encerrándose atrás sin dar apenas oportunidad a la remontada de la Fiorentina. Se le abrieron las puertas a diez minutos del final con la expulsión del carrilero Maggio por roja directa pero no lo aprovechó. Cuadrado fue también expulsado por segunda amarilla, ambas por fingir dos penaltis donde el árbitro erró en el último de la expulsión. Un encuentro con una entretenida y emocionante primera mitad eclipsada por la aburrida segunda.Fuente goal.com
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