Hace casi dos meses, el Real Madrid presentó su tercera equipación en un acto de campanillas: en lo alto de Torre Europa, con el Santiago Bernabéu a los pies, y con un Gareth Bale recién llegado a la disciplina merengue haciendo de modelo de la nueva y llamativa camiseta. El color, naranja, rememoraba la tonalidad del cielo de Madrid cuando el sol se esconde a eso de las 20:45, que es cuando comienzan los partidos en la Champions League. O al menos, eso se argumentaba desde la marca deportiva que viste al club madridista.
Vistoso como pocos, el color naranja de la tercera equipación seguía la línea de las camisetas complementarias de estos últimos años, de colores rojo y verde. Sin embargo, al contrario que éstas, ni ha tenido la misma aceptación entre el madridismo, ni tampoco se le ha podido dar el mismo uso desde el propio club a día de hoy. Y es que cuando el mes de noviembre ha comenzado ya, el Real Madrid todavía no ha estrenado su tercera equipación en competición oficial. No al menos hasta este martes día cinco, que es cuando podrá por fin lucirla por primera vez en toda su historia. El calendario no había propiciado en absoluto la puesta de largo con anterioridad.
La tercera equipación es teóricamente la de visitante para la Champions League, aunque en cursos anteriores también había sido utilizada en la Liga incluso lejos del Santiago Bernabéu. De hecho, si bien la camiseta roja se estrenó a mediados de septiembre de 2011 ante el Dinamo de Zagreb en competición europea, la camiseta verde del pasado curso se estrenó en el Sánchez Pizjuán en Liga el 15 de septiembre de 2012, para así poder darle visibilidad cuanto antes frente a los aficionados. Sin embargo, este curso, la camiseta naranja no había podido todavía ver la luz ni en Champions ni tampoco en Liga.
Y es que ante el Galatasaray en la jornada inaugural de Champions era imposible por la coincidiencia de colores con el equipo local. Mientras que en Liga tampoco ha surgido la posibilidad: no fue necesario cambiar el color blanco ni ante el Villarreal ni ante el Levante ni ante el Barcelona, y mientras tanto, en Granada y en Elche se jugó con la elástica azul, la segunda equipación. Podría haberla estrenado ante el Rayo Vallecano este pasado sábado, dado que en los dos años anteriores había jugado en Vallecas con las equipaciones rojas y verdes, respectivamente. Pero entre todas las partes se decidió que lo mejor era reservarla para el partido de este martes ante la Juventus, un choque mucho más atractivo para lo que esperan que sea un estreno tan rimbombante como lo fue la propia presentación.
Así pues, no ha sido hasta esta cuarta jornada de Champions ante el cuadro bianconeri como visitante, cuando el Real Madrid podrá lucir por primera vez en toda su historia de naranja. Dos meses después de haberla presentado en sociedad, y con un cuarto de la competición ya celebrada. Paradójicamente, el Castilla ya sí había jugado de naranja con anterioridad este mismo curso. La última vez, este mismo domingo ante el Deportivo de La Coruña.Fuente goal.com
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Vistoso como pocos, el color naranja de la tercera equipación seguía la línea de las camisetas complementarias de estos últimos años, de colores rojo y verde. Sin embargo, al contrario que éstas, ni ha tenido la misma aceptación entre el madridismo, ni tampoco se le ha podido dar el mismo uso desde el propio club a día de hoy. Y es que cuando el mes de noviembre ha comenzado ya, el Real Madrid todavía no ha estrenado su tercera equipación en competición oficial. No al menos hasta este martes día cinco, que es cuando podrá por fin lucirla por primera vez en toda su historia. El calendario no había propiciado en absoluto la puesta de largo con anterioridad.
La tercera equipación es teóricamente la de visitante para la Champions League, aunque en cursos anteriores también había sido utilizada en la Liga incluso lejos del Santiago Bernabéu. De hecho, si bien la camiseta roja se estrenó a mediados de septiembre de 2011 ante el Dinamo de Zagreb en competición europea, la camiseta verde del pasado curso se estrenó en el Sánchez Pizjuán en Liga el 15 de septiembre de 2012, para así poder darle visibilidad cuanto antes frente a los aficionados. Sin embargo, este curso, la camiseta naranja no había podido todavía ver la luz ni en Champions ni tampoco en Liga.
Y es que ante el Galatasaray en la jornada inaugural de Champions era imposible por la coincidiencia de colores con el equipo local. Mientras que en Liga tampoco ha surgido la posibilidad: no fue necesario cambiar el color blanco ni ante el Villarreal ni ante el Levante ni ante el Barcelona, y mientras tanto, en Granada y en Elche se jugó con la elástica azul, la segunda equipación. Podría haberla estrenado ante el Rayo Vallecano este pasado sábado, dado que en los dos años anteriores había jugado en Vallecas con las equipaciones rojas y verdes, respectivamente. Pero entre todas las partes se decidió que lo mejor era reservarla para el partido de este martes ante la Juventus, un choque mucho más atractivo para lo que esperan que sea un estreno tan rimbombante como lo fue la propia presentación.
Así pues, no ha sido hasta esta cuarta jornada de Champions ante el cuadro bianconeri como visitante, cuando el Real Madrid podrá lucir por primera vez en toda su historia de naranja. Dos meses después de haberla presentado en sociedad, y con un cuarto de la competición ya celebrada. Paradójicamente, el Castilla ya sí había jugado de naranja con anterioridad este mismo curso. La última vez, este mismo domingo ante el Deportivo de La Coruña.Fuente goal.com
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