El Real Madrid juega este sábado en Almería el partido I d.K. (después de Khedira). Quizás hace unas semanas nadie hubiera pensado que la ausencia del alemán hubiera supuesto semejante torpedo a la línea de flotación del proyecto de Carlo Ancelotti. Pero visto lo visto en estas últimas fechas, la lesión del alemán es todo un quebradero de cabeza en la Casa Blanca. No tanto por la opción de fichar un relevo en el mercado invernal, que al menos de momento parece cerrada a cal y canto. Pero sí por las variantes tácticas que maneja el entrenador para poder hacer frente a la desaparición del ‘6’ blanco. Que son muchas, y de muy diferente calado.
Y es que el único jugador con unas características similares a las de Khedira es Casemiro, un jugador que apenas ha contado en la presente campaña para Ancelotti. “Es muy joven, hay que ir despacio con él”, ha afirmado siempre el de Reggiolo, destacando eso sí que está en plenitud de ánimos para jugar, demostrando mucha profesionalidad en cada entrenamiento. La opción de apostar por Casemiro supondría para el equipo blanco no tener que cambiar de esquema, y poder seguir jugando con ese 4-3-3 al que parecía haberse acostumbrado por fin en los últimos partidos. La duda reside en el nivel que puede dar el mediocampista brasileño, no ya en partidos de pretemporada, donde demostró ser más que válido, sino en encuentros de la máxima exigencia.
De momento, la opción Casemiro parece que es la primera en el orden de preferencias del técnico merengue. Porque el técnico madridista no parece tener en consideración la opción de seguir jugando con el 4-3-3 pero con otro jugador de un perfil más talentoso y menos físico, como Isco Alarcón. El Barcelona ha demostrado durante los últimos años no necesitar de un mediocentro de un perfil más físico para guardar el equilibrio entre ataque y defensa, pero parece que en el Real Madrid todavía no se atreven a quitarse ese prejuicio de encima. Isco es un mediapunta, y no tanto un mediocentro. Di María, aunque polivalente, es también un extremo, más que un mediocentro. Así que si la opción Casemiro no funciona, el plan B pasa por cambiar directamente de esquema.
“Podemos jugar con Casemiro o con un doble pivote defensivo”, explicaba este viernes en rueda de prensa el propio Carlo Ancelotti. Y ahí está la segunda opción d.K. (después de Khedira): un doble pivote defensivo que equivaldría al 4-2-3-1 con el que el Real Madrid ha jugado los últimos tres años. Ronaldo podría seguir jugando en la izquierda, Bale en la derecha, y Benzema en punta. Y en esa posición de mediapunta ya sí podría entrar con más asiduidad Isco Alarcón, del que entienden que se maneja mejor unos metros por delante de los mediocentros y no a su misma altura.
Si pecáramos de simplistas, podríamos decir que la opción A daría alas a Casemiro, mientras que la opción B se las daría a Isco Alarcón. Evidentemente, no es una disyuntiva tan obvia, sino que interviene también un cambio de esquema, y casi de entender el engranaje del equipo. Un debate bastante más complejo. Pero lo que sí queda de manifiesto es que, si ambos se encuentran hoy a las puertas del once después de perder sus opciones de ser ‘titularísimos’, sea cual sea la decisión que tome Ancelotti en estas semanas, supondrá una palada más de tierra en las aspiraciones de al menos uno de los dos jugadores.
Azorado por la opción de ver a un jugadorazo como Isco nuevamente descartado de los planes de Ancelotti en apenas tres meses de competición, al menos el técnico blanco sí dejó abierta una opción táctica más que ilusionante para el madridismo. “Xabi Alonso e Illarramendi pueden jugar juntos”, espetó. Lo había negado hasta el momento, pero la posibilidad de cambiar de esquema a un 4-2-3-1 facilitaría la aparición de esta dupla en el doble pivote. Sin duda, sería emocionante ver a dos jugadores juntos con semejante control del juego y lectura de los partidos. Y es más, porque Ancelotti apunta a Isco “de medio ofensivo” por delante. Un tridente excitante. Un trío ideal para la búsqueda del equilibrio y el control de los partidos, si es que es eso lo que solivianta al técnico madridista.
Los momentos de crisis son también momentos de oportunidades, dicen. Y si bien puede asustar una revolución apenas encontrada la disposición ideal del equipo, las opciones que brinda la plantilla del Real Madrid a Carlo Ancelotti invitan también a la esperanza toda vez se abre ante sus pies la era d.K. (después de Khedira).
Fuente goal.com
COMENTARIO REGISTRATE en Mundo-deportes, pide nick y contraseña y correo por ello no recibirás publicidad y es gratis, no olvidar dejar un mensaje en el foro para que se active el registro.
http://www.mundo-deportes.com/
Y es que el único jugador con unas características similares a las de Khedira es Casemiro, un jugador que apenas ha contado en la presente campaña para Ancelotti. “Es muy joven, hay que ir despacio con él”, ha afirmado siempre el de Reggiolo, destacando eso sí que está en plenitud de ánimos para jugar, demostrando mucha profesionalidad en cada entrenamiento. La opción de apostar por Casemiro supondría para el equipo blanco no tener que cambiar de esquema, y poder seguir jugando con ese 4-3-3 al que parecía haberse acostumbrado por fin en los últimos partidos. La duda reside en el nivel que puede dar el mediocampista brasileño, no ya en partidos de pretemporada, donde demostró ser más que válido, sino en encuentros de la máxima exigencia.
De momento, la opción Casemiro parece que es la primera en el orden de preferencias del técnico merengue. Porque el técnico madridista no parece tener en consideración la opción de seguir jugando con el 4-3-3 pero con otro jugador de un perfil más talentoso y menos físico, como Isco Alarcón. El Barcelona ha demostrado durante los últimos años no necesitar de un mediocentro de un perfil más físico para guardar el equilibrio entre ataque y defensa, pero parece que en el Real Madrid todavía no se atreven a quitarse ese prejuicio de encima. Isco es un mediapunta, y no tanto un mediocentro. Di María, aunque polivalente, es también un extremo, más que un mediocentro. Así que si la opción Casemiro no funciona, el plan B pasa por cambiar directamente de esquema.
“Podemos jugar con Casemiro o con un doble pivote defensivo”, explicaba este viernes en rueda de prensa el propio Carlo Ancelotti. Y ahí está la segunda opción d.K. (después de Khedira): un doble pivote defensivo que equivaldría al 4-2-3-1 con el que el Real Madrid ha jugado los últimos tres años. Ronaldo podría seguir jugando en la izquierda, Bale en la derecha, y Benzema en punta. Y en esa posición de mediapunta ya sí podría entrar con más asiduidad Isco Alarcón, del que entienden que se maneja mejor unos metros por delante de los mediocentros y no a su misma altura.
Si pecáramos de simplistas, podríamos decir que la opción A daría alas a Casemiro, mientras que la opción B se las daría a Isco Alarcón. Evidentemente, no es una disyuntiva tan obvia, sino que interviene también un cambio de esquema, y casi de entender el engranaje del equipo. Un debate bastante más complejo. Pero lo que sí queda de manifiesto es que, si ambos se encuentran hoy a las puertas del once después de perder sus opciones de ser ‘titularísimos’, sea cual sea la decisión que tome Ancelotti en estas semanas, supondrá una palada más de tierra en las aspiraciones de al menos uno de los dos jugadores.
Azorado por la opción de ver a un jugadorazo como Isco nuevamente descartado de los planes de Ancelotti en apenas tres meses de competición, al menos el técnico blanco sí dejó abierta una opción táctica más que ilusionante para el madridismo. “Xabi Alonso e Illarramendi pueden jugar juntos”, espetó. Lo había negado hasta el momento, pero la posibilidad de cambiar de esquema a un 4-2-3-1 facilitaría la aparición de esta dupla en el doble pivote. Sin duda, sería emocionante ver a dos jugadores juntos con semejante control del juego y lectura de los partidos. Y es más, porque Ancelotti apunta a Isco “de medio ofensivo” por delante. Un tridente excitante. Un trío ideal para la búsqueda del equilibrio y el control de los partidos, si es que es eso lo que solivianta al técnico madridista.
Los momentos de crisis son también momentos de oportunidades, dicen. Y si bien puede asustar una revolución apenas encontrada la disposición ideal del equipo, las opciones que brinda la plantilla del Real Madrid a Carlo Ancelotti invitan también a la esperanza toda vez se abre ante sus pies la era d.K. (después de Khedira).
Fuente goal.com
COMENTARIO REGISTRATE en Mundo-deportes, pide nick y contraseña y correo por ello no recibirás publicidad y es gratis, no olvidar dejar un mensaje en el foro para que se active el registro.
http://www.mundo-deportes.com/