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Partido algo extraño en el KC Stadium, desde el momento en que se produjo la expulsión del Citizen Kompany en el temprano minuto nueve de roja directa por agarrón a Jelavic cuando se marchaba solo al ataque. Dicha tarjeta roja ocurrió cuando los equipos se estaban aún asentando y no había tenido lugar ninguna ocasión por parte de ningún equipo.
Sólo cuatro minutos más tarde sucedió el inesperado gol de David Silva, en la que era la primera jugada de control por parte de los hombres de Pellegrini desde que jugaban con diez jugadores. El centrocampista canario chutó con la zurda un potente disparo imparable.
No se amilanaron los locales del Hull City, que se aprestaron al control y presión en ataque, creando alguna ocasión como la de Jelavic, que en el minuto 19 no llegó al estar muy escorado a la izquierda pese al gran pase de El Mohamady. Jelavic era sin duda el hombre que más peligro llevaba por parte del Hull City.
Sin embargo, hacia la media hora de encuentro el Manchester City ya se había conseguido quitar de encima la presión local, estirándose en ataque hasta el punto de protagonizar la ocasión más clara su jugador Zabaleta con un trayazo que dio en el larguero y cuyo rebote no llegó a traspasar en la totalidad la línea de la portería defendida por McGregor, como demostraría la cámara.
Acabando la primera mitad el City comenzó a acusar el cansancio causado por jugar con uno menos y por tener un calendario más cargado que el Hull City. Ello provocó algún ataque local, como el disparo raso de Livermore en el minuto 42 que se fue a la derecha de Hart.
Tras el descanso ambos equipos salieron con ganas de gol, especialmente el Hull, que se veía en desventaja en el marcador. El problema del equipo local es que cae en demasía en los fuera de juego, lo que le hace malograr muchas ocasiones. Sin embargo, es el equipo de Manchester el que tiene la ocasión más clara en el minuto 71 que no llega a nada al fallar estrepitosamente Fernandinho tras recibir en el área un buen pase de Silva.
El español Jesús Navas contaría con algunos minutos al salir acabando ya el encuentro. Aportó mucha frescura en un equipo que llevaba casi todo el encuentro jugando con diez jugadores. A falta de un minuto para acabar el partido, el bosnio Dzeko sentenció el partido a favor de los Citizen al finalizar una gran jugada de Silva, que se fajó durante todo el encuentro.
Fuente goal.com
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Sólo cuatro minutos más tarde sucedió el inesperado gol de David Silva, en la que era la primera jugada de control por parte de los hombres de Pellegrini desde que jugaban con diez jugadores. El centrocampista canario chutó con la zurda un potente disparo imparable.
No se amilanaron los locales del Hull City, que se aprestaron al control y presión en ataque, creando alguna ocasión como la de Jelavic, que en el minuto 19 no llegó al estar muy escorado a la izquierda pese al gran pase de El Mohamady. Jelavic era sin duda el hombre que más peligro llevaba por parte del Hull City.
Sin embargo, hacia la media hora de encuentro el Manchester City ya se había conseguido quitar de encima la presión local, estirándose en ataque hasta el punto de protagonizar la ocasión más clara su jugador Zabaleta con un trayazo que dio en el larguero y cuyo rebote no llegó a traspasar en la totalidad la línea de la portería defendida por McGregor, como demostraría la cámara.
Acabando la primera mitad el City comenzó a acusar el cansancio causado por jugar con uno menos y por tener un calendario más cargado que el Hull City. Ello provocó algún ataque local, como el disparo raso de Livermore en el minuto 42 que se fue a la derecha de Hart.
Tras el descanso ambos equipos salieron con ganas de gol, especialmente el Hull, que se veía en desventaja en el marcador. El problema del equipo local es que cae en demasía en los fuera de juego, lo que le hace malograr muchas ocasiones. Sin embargo, es el equipo de Manchester el que tiene la ocasión más clara en el minuto 71 que no llega a nada al fallar estrepitosamente Fernandinho tras recibir en el área un buen pase de Silva.
El español Jesús Navas contaría con algunos minutos al salir acabando ya el encuentro. Aportó mucha frescura en un equipo que llevaba casi todo el encuentro jugando con diez jugadores. A falta de un minuto para acabar el partido, el bosnio Dzeko sentenció el partido a favor de los Citizen al finalizar una gran jugada de Silva, que se fajó durante todo el encuentro.
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