«A Quincy hay que echarle un galgo», sentenció de un modo elocuente la noche del jueves el entrenador del Getafe, Míchel, en la sala de prensa del Coliseum Alfonso Pérez. La velocidad en ataque del Málaga volvió a causar estragos a domicilio. Apenas ha tenido que cumplirse un mes de competición para que el equipo se haya ganado el respeto de la Liga y se haya merecido la etiqueta de visitante más temible.
El Málaga apenas acaparó titulares durante el verano, a pesar de que la compra del club por un jeque árabe suponía un acontecimiento sin precedentes en la historia de la Liga. Sin embargo, sus actuaciones en Zaragoza y en Getafe le han permitido abrirse hueco en las páginas de los periódicos y en las escaletas de la radio y la televisión.
«Tres balas, dos goles», titulaba ayer la crónica de ámbito estatal del diario 'As' en alusión a los atacantes del Málaga y al resultado final. No fue menos contundente que otros rotativos, como 'El País' -«El Málaga descose al Getafe»- y 'Público' -«Rondón jugó en otro planeta»-, ambos en sus ediciones nacionales. Es sólo una muestra del cambio producido
Acostumbrados a ocupar casi todo el espacio de sus programas con cualquier detalle relativo al Real Madrid o el Barcelona, en los espacios audiovisuales también hubo lugar para el brillante papel del Málaga en el Coliséum Alfonso Pérez de Getafe. En 'El partido de las doce', programa nocturno de la Cadena Cope, reconocían lo insólito del comienzo del equipo: «Es curioso lo del Málaga, con dos derrotas en casa y dos victorias fuera. Se plantaron 0-5 en Zaragoza y 0-2 en Getafe (...) Con espacios y velocidad puede hacer mucho daño. Se decía que tenía que encontrar el equilibrio, que era un equipo partido por la mitad... Pues ha demostrado que juega muy bien hacia arriba con Quincy, Rondón y Eliseu, que van a dar mucho de qué hablar en esta Liga».
Hasta la presencia del jeque Abdullah Al-Thani parece haber quedado en un segundo plano. No hace mucho su asistencia al palco o la de alguno de sus familiares era la comidilla y suscitaba morbo en los informativos televisivos por el lujo de los coches deportivos en el aparcamiento de La Rosaleda. Ahora el Málaga da de qué hablar por otros motivos. Por su juego y por su trío de ataque.
El Málaga apenas acaparó titulares durante el verano, a pesar de que la compra del club por un jeque árabe suponía un acontecimiento sin precedentes en la historia de la Liga. Sin embargo, sus actuaciones en Zaragoza y en Getafe le han permitido abrirse hueco en las páginas de los periódicos y en las escaletas de la radio y la televisión.
«Tres balas, dos goles», titulaba ayer la crónica de ámbito estatal del diario 'As' en alusión a los atacantes del Málaga y al resultado final. No fue menos contundente que otros rotativos, como 'El País' -«El Málaga descose al Getafe»- y 'Público' -«Rondón jugó en otro planeta»-, ambos en sus ediciones nacionales. Es sólo una muestra del cambio producido
Acostumbrados a ocupar casi todo el espacio de sus programas con cualquier detalle relativo al Real Madrid o el Barcelona, en los espacios audiovisuales también hubo lugar para el brillante papel del Málaga en el Coliséum Alfonso Pérez de Getafe. En 'El partido de las doce', programa nocturno de la Cadena Cope, reconocían lo insólito del comienzo del equipo: «Es curioso lo del Málaga, con dos derrotas en casa y dos victorias fuera. Se plantaron 0-5 en Zaragoza y 0-2 en Getafe (...) Con espacios y velocidad puede hacer mucho daño. Se decía que tenía que encontrar el equilibrio, que era un equipo partido por la mitad... Pues ha demostrado que juega muy bien hacia arriba con Quincy, Rondón y Eliseu, que van a dar mucho de qué hablar en esta Liga».
Hasta la presencia del jeque Abdullah Al-Thani parece haber quedado en un segundo plano. No hace mucho su asistencia al palco o la de alguno de sus familiares era la comidilla y suscitaba morbo en los informativos televisivos por el lujo de los coches deportivos en el aparcamiento de La Rosaleda. Ahora el Málaga da de qué hablar por otros motivos. Por su juego y por su trío de ataque.