Sergio Ramos, lateral derecho internacional del Real Madrid, fue contundente a la hora de rechazar que fuera a hacer daño a Leo Messi en el 'Clásico' del lunes ante el Barcelona, en el que fue expulsado por una dura entrada al argentino, y explicó que también pidió disculpas por sus empujones a sus compañeros de selección Carles Puyol y Xavi Hernández.
Ramos admitió que se sentía "mal" por todo lo escuchado tras el partido, y resaltó que "para nada" quiso lesionar a nadie, en una comparecencia de prensa celebrada en la Ciudad Deportiva de Valdebebas a petición propia.
"A lo largo de mi carrera los números están ahí y ningún futbolista puede decir que ha sido lesionado por Sergio Ramos", aseveró el sevillano, quien explicó que debido a la rapidez de Messi no calculó "bien la acción".
No obstante, reconoció que se equivocó al dar la patada al argentino, pero insistió: "Para nada voy a hacer daño ni a Leo Messi ni a ningún otro compañero. Al igual que yo pienso que nadie salta al campo con esa idea, yo para nada salgo con la mentalidad hacer daño a un compañero", dijo. Ramos, quien cree que por tratarse de él las acciones se exageran más, aunque no se encuentra orgulloso, apuntó que en la entrada incluso golpeó más a su compañero Lass Diarra que a Messi. Asimismo comentó, sobre los empujones tras dicha acción a Puyol y Xavi, que lo primero que hizo el martes fue hablar con ambos porque "ante todo" son "un grupo de amigos de la selección y siempre hay que mantener el buen ambiente".
No quiso entrar en polémicas sobre los gestos de algunos barcelonistas con la mano abierta hacia el público en señal de los cinco tantos conseguidos, porque manifestó que "cada uno es dueño de sus actos", pero de inmediato precisó que "cuando te toca estar en la otra parte, en la del equipo que pierde, quizá esos gestos no sienten muy bien" y que "no hay que olvidar que el fútbol da muchas vueltas, y hoy puedes estar disfrutando y el día mañana lamentándote". Sergio Ramos no está preocupado por ser, junto a Fernando Hierro, el que más rojas ha visto con la camiseta del Real Madrid. "Estoy súpertranquilo", porque, aunque no le beneficia, entiende que muchas de ellas no han sido justas y que no ha lesionado a nadie. Lo que más le inquieta es lo que pueda afectar a los niños que tienen referentes en los futbolistas.
En cuanto a la multa económica impuesta por la UEFA al Real Madrid tras su expulsión y la de Xabi Alonso en el partido contra el Ajax de Amsterdam, presuntamente por forzar la doble amonestación para pasar a octavos 'limpios' de amonestaciones, consideró que "el club hace bien recurriendo las sanciones. "Evidentemente nosotros no hicimos nada malo ni nada ilegal. Para nada buscamos esa tarjeta y cada uno que piense lo que quiera", añadió.