* Tercera derrota de los de Ivanovic en la Euroliga, que se vieron sorprendidos por los polacos
La quinta derrota consecutiva del Caja Laboral en Euroliga, ante el Asseco Prokom, 75-81, pone muy complicada la presencia de los vitorianos entre los dieciséis mejores equipos de la Euroliga.
En un partido donde la victoria era el único objetivo, los de Ivanovic no supieron rematar al Prokom tras cobrar once puntos de ventaja en el arranque del segundo tiempo y terminaron por ceder de nuevo un partido en el Buesa Arena.
El Baskonia tiene que empezar a tirar de calculadora para alcanzar la siguiente fase y deberá ganar los tres partidos que restan, ante Khimki y Partizán en Vitoria, y en la visita a Kaunas, además de poner a su favor la diferencia de puntos con rusos y serbios. Además deberá mirar también los enfrentamientos de sus rivales directos para poder tener resultados favorables.
Caja laboral y Prokom se enfrascaron en el duelo sin ninguna tensión sobre la pista y esto se tradujo en un intercambio de canastas en el primer cuarto, 24-20, donde destacaron los siete puntos de Haislip y San Emeterio y los seis de Barac.
No cambió de rumbo el partido con un Baskonia incómodo en la cancha incapaz de marcar distancias. Asseco Prokom llegó a adelantarse, 32-34 en el minuto diecisiete, pero los de Ivanovic lo arreglaron con un parcial de 7-0 que les concedió la ventaja en el intermedio, 39-34.
La reanudación fue una montaña rusa en la que Caja Laboral pasó de ganar por once, 45-34 con una salida en tromba, a colapsarse en ataque, perder la claridad de ideas y verse por detrás en el luminoso, 47-49 minuto 27.
Con todo por decidir comenzó el cuarto final con los polacos por delante, 56-57, ante un Baskonia incapaz de coger el pulso al partido. Las alarmas rojas saltaron cuando Prokom llegó a los seis puntos de ventaja, 58-64 a falta de siete minutos.
Ivanovic recurrió de nuevo a la táctica de un único hombre grande en pista pero no tuvo el efecto de otras tardes. Los polacos aguantaron el pulso y alcanzaron su máxima renta, 65-75 a menos de tres minutos.
Las prisas aceleraron al Caja Laboral que se acercó a cuatro puntos en el minuto final, 73-77. Ribas erró una bandeja que fue la losa que enterró las opciones de victoria vitorianas.