Cristiano Ronaldo ya está otra vez lesionado. Es la tercera ocasión que le ocurre desde que está en el fútbol español. No será porque los árbitros no estén suficientemente advertidos. Desde este periódico venimos pidiendo protección especial para las figuras de la Liga si queremos que haya espectáculo. Sin artistas, no hay función. Y CR7 es una parte muy importante del negocio liguero. Y como él, futbolistas como Messi, Forlán o Agüero que también han sufrido en propia carne entradas duras y fuera de lugar.
Sin embargo, siempre se lesiona el mismo. En el Camp Nou, cuando apenas se habían disputado 30 segundos de partido, Villa pisó el tobillo de Cristiano. De haber sido en otro momento del encuentro, seguramente hubiera acarreado la tarjeta amarilla pero el hecho de que sucediera al principio del choque fue una especie de atenuante que le vino muy bien a Iturralde González.
En la jugada del penalti, el portugués se llevó la peor parte posible: ni le pitaron la pena máxima, ni expulsaron a Valdés —ya tenía una amarilla— y, además, fue cazado por el portero que primero le traba la pierna izquierda y luego cae con todo su peso sobre el tobillo derecho del jugador, una articulación maltrecha por culpa de los golpes que recibe.
Existe una cierta impunidad a la hora de emplearse a fondo con Cristiano Ronaldo y Messi. Es como si hubiera barra libre ante la permisividad arbitral. Mourinho, que acababa de aterrizar en el fútbol español, no necesitó mucho tiempo para denunciarlo ante la evidencia de los hechos.
Si los colegiados no aplican el reglamento ante este tipo de acciones y con esta clase de jugadores la Liga puede acabar convirtiéndose en un subproducto. Necesitamos a los cristianos, messis, agüeros y forlanes en plenitud de facultades y perfectamente protegidos.
Creo que cristiano es el que recibe mas faltas.