El holandés Johan Cruyff sale en defensa del entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, en la columna semana que publica en El Periódico y asegura que lo único que hizo el técnico el sábado fue "esperar las órdenes del club". Le exime de cualquier responsabilidad en la organización del viaje que llevó al Barcelona a Pamplona , adonde llegó a las 20:02, cuando el partido contra Osasuna debía comenzar a las 20:00.
"El sábado la normalidad sólo llegó al empezar a rodar el balón. Y sólo fue un paréntesis de 90 minutos. Antes, el caos y la desinformación. Después, más de lo mismo con Guardiola dando la cara por todos y contra todos. Desde primera hora de la tarde empezaron a matar al técnico azulgrana como si él fuera el culpable, y en el fondo lo único que hizo fue esperar las órdenes del club. Llegó el equipo a Pamplona y le siguieron dando a Pep. Acabó el partido, y más. Al final, además de entrenador, hasta le tocó hacer de portavoz. Y le seguían dando".
"El problema, una vez más, está en una película previa en la que salen muchos actores. El club que juega en casa, el visitante, la federación y la Liga de Fútbol Profesional. Cuatro actores que pasan a ser cinco con la prensa. O seis, si esta vez le sumamos a la gente de los aeropuertos (AENA). Todos con derecho a opinar y aquí se monta el circo. A unos les dicen esto; a los otros, aquello, y a los de más allá, nada. ¿El problema? Vista la excepcionalidad de la situación con los aviones, la ausencia de una persona, una, con la potestad de marcar la línea a seguir".
"¿A quién llamaban todos? A la Federación. Y allí no había la persona adecuada para decir blanco o negro. O se suspende y no hay vuelta atrás o espabílate y preséntate. Coge el bus o la bici, pero el partido es en tal sitio y a tal hora. A partir de aquí no hay más discusión. La única excepción, si vas o vienes de una isla".
"¿Servirá el esperpento del viernes/sábado para arreglar futuras situaciones similares? Ojalá fuera así. ¿Se pueden organizar mejor las partes implicadas? Pueden. La pregunta es si quieren ya que son los mismos actores que siempre van por libre. La Federación tiene su Copa del Rey y la pone a doble partido para tener más ingresos. La LFP tiene su Liga y ni hablar tampoco de reducir equipos. La federación tiene su equipo nacional y decide lo que decide, cargarse la pretemporada de algunos y visitar mundo (Argentina y México) para su beneficio (dinero y votos para el Mundial 2018). Los clubs, aliándose o peleándose en función del dinero que van a percibir del próximo contrato televisivo. Con este panorama, ¿cómo no va a vivirse el vodevil del sábado, con aseveraciones, falsas promesas y cambios sobre la marcha?"
"Y con todo, aún hay quien se mira la letra pequeña para ver si 20 minutos de retraso son motivo de pérdida de puntos. Y no tres. Seis. De risa... por no llorar".