Confirmada la renuncia de Larry Brown como entrenador y el nombramiento de Paul Silas como su sustituto de manera interina. Los malos resultados fueron la causa de su adiós.
Otro proyecto más del legendario Michael Jordan se vino abajo, esta vez como dueño de los Bobcats de Charlotte después que el veterano entrenador Larry Brown, el hombre que eligió para convertir a la última franquicia que llegó a la NBA en equipo ganador, renunció hoy, miércoles, al cargo.
Brown, de 70 años, que aceptó volver de nuevo al banquillo de los entrenadores después de la "frustración" vivida con los Knicks de Nueva York, de nuevo tiene que salir por la puerta de atrás a pesar de estar el sexto en la lista de todos los tiempos con 1.098 triunfos. Aunque si se cuentan los triunfos que tuvo en la desaparecida Asocación Americana de Baloncesto (ABA) entonces su marca es de 1.327 victorias, a sólo nueve de superar a Don Nelson (1.335), que ocupa el primer lugar de la lista.
Pero esta temporada, su tercera con los Bobcats, el equipo sólo ha podido ganar nueve partidos con 19 derrotas, además de perder los últimos cuatro partidos, tres de ellos por diferencias superiores a los 31 puntos, el último fue ante los Thunder de Oklahoma City (81-99).
El equipo en un comunicado oficial confirmaron la renuncia de Brown y el nombramiento de Paul Silas como el entrenador interino que va a ocupar su puesto. Silas, de 67 años, como entrenador tiene marca perdedora de 355-400 en 10 años dentro de la NBA, incluyendo el periodo de cuatro años (1999-2003) que dirigió a los Hornets de Charlotte. El nuevo técnico interino de los Bobcats también dirigió a los Clippers de Los Ángeles y los Cavaliers de Cleveland, sin ningún tipo de éxito importante ni tan siquiera en el proceso de reconstrucción.
"Me reuní con el entrenador Brown hace dos semanas para valorar el desarrollo del equipo", declaró Jordan en un comunicado oficial. "Nos hemos vuelto a reunir esta mañana después del entrenamiento y claramente no hemos logrado las expectativas que teníamos por lo que ambos estuvimos de acuerdo en hacer un cambio".
Brown, miembro del Salón de la Fama, que llegó a los Bobcats para ser la decimotercera vez que era contratado como entrenador, ha conseguido llevar a ocho equipos diferentes a la fase final de la NBA, incluidos los Bobcats que lo hicieron la pasada temporada. El veterano entrenador que tiene el merecido apodo de "trotamundos" también dirigió en el baloncesto universitario para lograr el título nacional (1988) con los Jayhawks de Kansas.
En el 2001, fue nombrado como Entrenador del Año después que logró que los Sixers de Filadelfia, con el base Allen Iverson de líder, llegasen a las Finales de la NBA que perdieron ante los Lakers de Los Ángeles. Sin embargo, tres años después lideró a los Pistons de Detroit al título de liga y vengarse de los Lakers para conseguir el primero como entrenador dentro de la NBA y convertirse en el único que tiene los dos títulos, el universitario de la NCAA y el profesional de la NBA.
Brown, que fue introducido al Salón de la Fama en el 2002, llegó a los Bobcats por la gran amistad que le une a Jordan, actual dueño del equipo, y su apoyo al estado de Carolina del Norte después que jugó con el equipo universitario y 1964 también ganó la medalla de oro con Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Tokio 1964. Su vuelta al banquillo era algo que no se esperaba después de la manera como había sido despedido por los Knicks a los que prefirió para reconstruir el equipo a pesar de tener con los Pistons la opción de seguir luchando por el título de liga.
Sin embargo, la experiencia con el equipo de su sueños, dado que Brown nació en Nueva York, iba a convertirse en una auténtica pesadilla después del enfrentamiento que tuvo con los jugadores y principalmente con el ex presidente del club, Isiah Thomas, que había sido el que más luchó por conseguir su fichaje. A pesar de la renuncia de seguir al frente de los Bobcats, el agente de Brown, Joe Glass, dijo que el veterano entrenador para nada tiene pensado retirarse sino que "muy pronto" podría volver a estar dirigiendo en la NBA.
Jordan, que había dicho que esta temporada tenían mejor equipo que la pasada, no ha logrado con los cambios que hizo durante el verano conseguir ese objetivo hasta el momento. Además se ha comprobado que la marcha del base Raymond Felton y el pívot Tyson Chandler, ambos triunfando en los Knicks de Nueva York y los Mavericks de Dallas, no fue su mejor decisión.
Brown, que se queda con marca de 88-108, todavía le quedaba esta temporada y la próxima del contrato que firmó por cuatro años y de acuerdo a Jordan seguirá como su asesor personal. Mientras que dentro de la NBA la renuncia de Brown era algo que no se esperaban y ha causado cierta tristeza porque la liga pierde a uno de los mejores entrenadores que hay en activo, que además siempre ha llegado a las franquicias con peores marcas para trabajar en la reconstrucción.