Estreno de la temporada en La Rosaleda a lo grande con un Málaga muy superior que goleó 4-0 al Granada en un derby andaluz que sólo tuvo el color blanquiazul como predominante. Desde el primer momento quedaron claras las cosas. Los de Pellegrini dominaban el balón y se volcaban ante la meta de Roberto Fernández, mientras que los rojiblancos capeaban el temporal como podían y buscaban un tímido contragolpe.
A los 2' Cazorla
avisaba con un disparo que desvió un defensa, pero dos minutos después
no perdonó y marcó el primer gol del choque. Un saque de esquina corto
de Duda al ex del Villarreal que lanzó un zurdazo colocado al poste ante un Roberto muy tapado que solo vio cuando se colaba en la meta.
Esto todavía dio más fuerza al equipo de Pellegrini que no cambió su esquema. A los 24´llegó el 2-0 tras un centro de Gámez que cabeceó perfectamente Joaquín
picado junto al palo, solo sin marca. De ahí al final del primer tiempo
se sucedieron las ocasiones locales y solo a los 36´el Granada hizo
trabajar a Willy Caballero con una falta directa de Dani Benítez que a
bote pronto desvió.
Tras el descanso en la primera acción todo quedó resuelto. A los 47´ una falta sobre Van Nistelrroy al borde del área es lanzada con habilidad por Cazorla,
aprovechando que saltaba la barrera. El balón entró suave y despacito
para firmar el 3-0 y el tercer gol del internacional asturiano en esta
temporada con su nuevo equipo. Ahí quedó todo resuelto. Tanto que el
público, que llenaba La Rosaleda con casi 28.000 espectadores (y un
millar de seguidores granadinos), comenzó a hacer la ola y a disfrutar
de lo grande en la temporada de la ilusión.
Llegaron los cambios
y los dos equipos parecían conformarse con el resultado de la calurosa
noche septembrina. El Málaga siguió dominando y llegó el 4-0 en el 72 tras una jugada primorosa de triangulación entre Van Nistelrooy y Cazorla con pase a Joaquín
que el portuense remató a bote pronto a las mallas. Su segundo gol de
la noche. Y pudieron ser más goles los que se llevó el Granada en su
visita 36 años después en el retorno a la Primera división.
La
diferencia entre los dos equipos fue enorme en todos los conceptos:
intensidad, control del juego, creación de peligro y goles. Las claves del éxito en el fútbol. El público se marchó feliz del estadio, todo lo contrario que los seguidores granadinos.
Y un detalle. Gracias a la deferencia del Málaga (que ha vetado a la prensa digital para los partidos) vimos el partido por televisión. Después de muchísimos años in situ en el campo, pese a los adelantos de la TV, el ambiente y la visión del juego no son iguales que desde un sillón en casa.
A los 2' Cazorla
avisaba con un disparo que desvió un defensa, pero dos minutos después
no perdonó y marcó el primer gol del choque. Un saque de esquina corto
de Duda al ex del Villarreal que lanzó un zurdazo colocado al poste ante un Roberto muy tapado que solo vio cuando se colaba en la meta.
Esto todavía dio más fuerza al equipo de Pellegrini que no cambió su esquema. A los 24´llegó el 2-0 tras un centro de Gámez que cabeceó perfectamente Joaquín
picado junto al palo, solo sin marca. De ahí al final del primer tiempo
se sucedieron las ocasiones locales y solo a los 36´el Granada hizo
trabajar a Willy Caballero con una falta directa de Dani Benítez que a
bote pronto desvió.
Tras el descanso en la primera acción todo quedó resuelto. A los 47´ una falta sobre Van Nistelrroy al borde del área es lanzada con habilidad por Cazorla,
aprovechando que saltaba la barrera. El balón entró suave y despacito
para firmar el 3-0 y el tercer gol del internacional asturiano en esta
temporada con su nuevo equipo. Ahí quedó todo resuelto. Tanto que el
público, que llenaba La Rosaleda con casi 28.000 espectadores (y un
millar de seguidores granadinos), comenzó a hacer la ola y a disfrutar
de lo grande en la temporada de la ilusión.
Llegaron los cambios
y los dos equipos parecían conformarse con el resultado de la calurosa
noche septembrina. El Málaga siguió dominando y llegó el 4-0 en el 72 tras una jugada primorosa de triangulación entre Van Nistelrooy y Cazorla con pase a Joaquín
que el portuense remató a bote pronto a las mallas. Su segundo gol de
la noche. Y pudieron ser más goles los que se llevó el Granada en su
visita 36 años después en el retorno a la Primera división.
La
diferencia entre los dos equipos fue enorme en todos los conceptos:
intensidad, control del juego, creación de peligro y goles. Las claves del éxito en el fútbol. El público se marchó feliz del estadio, todo lo contrario que los seguidores granadinos.
Y un detalle. Gracias a la deferencia del Málaga (que ha vetado a la prensa digital para los partidos) vimos el partido por televisión. Después de muchísimos años in situ en el campo, pese a los adelantos de la TV, el ambiente y la visión del juego no son iguales que desde un sillón en casa.
El Granada parece un serio espirante al descenso y el Malaga a posiciones de UEFA sino mas arriba como se descuiden los de la segunda liga de primera division. |