Con un 4-1-3-2
salió a por todas el conjunto local fruto de lo cual a los 5 minutos ya
había dispuesto de dos buenas ocasiones de gol. A los 10’ dos nuevas
aproximaciones con criterio hacían vislumbrar un encuentro de claro
dominio local, máxime por la poca consistencia que mostraban los
asturianos.
Y tanto fue el cántaro a la fuente que en el minuto 15 Hemed condujo un contraataque abriendo a la derecha para que Pereira centrase al segundo palo donde esperaba Gonzalo el Chory Castro quien sólo tuvo que poner la cabeza para adelantar a los bermellones (1-0).
Reaccionaron
los de Preciado adelantando unos metros sus líneas, logrando la primera
jugada trenzada y primer lanzamiento a puerta en el minuto 20. De
repente el Mallorca había desaparecido buscando sólo la contra y los gijonenses se habían adueñado del esférico y del terreno de juego.
Una
falta al borde del área supondría la mejor ocasión sportinguista en la
primera mitad, se produjo tras un duro lanzamiento que despejó, no sin
dificultades, Dudú Aouate.
Acabaron las
primeros 45 minutos con el partido roto debido a la trifulca originada a
raíz de una malintencionada devolución del balón de David Barral
que a punto estuvo de suponer el empate. Mucho más fútbol ofrecieron
los anfitriones aunque fueron de más a menos al tiempo que despertaban
los rojiblancos, hoy de blanco.
Tras el descanso entró Mate Bilic por Barral y en su primera oportunidad, en el 49’, estableció el empate de cabeza a centro de Lora desde la derecha, jugada que guardaba bastante similitud con el gol local (1-1).
Sin
apenas tiempo para retomar el encuentro, éste había cambiado
completamente, lo que enrabietó a los bermellones que acto seguido
dispusieron de dos buenas ocasiones, a las que no dejaron de reaccionar
los muchachos de Preciado.
Trató de buscar más peligro arriba Caparrós al
dar entrada a Víctor pero el partido había perdido en calidad aunque no
en intensidad; el balón iba de lado a lado sin demasiado criterio y
sólo alguna acción individual creaba cierto peligro hasta que llegó la
de De las Cuevas que en el 65’ se fue con facilidad de su marcador, Bigas, y su centro lo introdujo en propia meta Joao Victor (1-2).
Pudo sentenciar Bilic
en el 72 tras un error de Tejera que había salido unos instantes antes,
sustituyendo a Tissone, supuestamente para buscar más mordiente; el
disparo del delantero croata salió fuera por muy poco.
El
habitual carrusel de cambios no hizo más que romper el encuentro, gotas
de calidad asturianas y corazón mallorquín que conseguiría encerrar a
los de Preciado. Pina mereció el empate con un disparo al poste y poco más hasta el final a no ser la impotencia local.
Impotencia y sensación de haber desaprovechado una gran oportunidad, no sólo para cortar ese gafe de los últimos años ante el Sporting -son ya cuatro derrotas en las últimas seis visitas
de los asturianos-, sino también para que Caparrós logra su primera
victoria en el banquillo balear. Habrá que seguir esperando por ello, y
en la próxima jornada toca el Barcelona a domicilio...
Me gusto el Mallorca hasta que marco el Chori,despues se puso al contrataque y dejo que el sporting tuviera campo y en una jugada aislada marco Bilic otra vez fallo defensivo, y como no la desgracia de querer evitar el segundo y meter el balon en propia puerta puso el marcador final2-1,y los ultimos minutos el Mallorca tuvo oportunidades pero no hay manera.
Mucho premio para el sporting,un empate hubiera sido mas justo
salió a por todas el conjunto local fruto de lo cual a los 5 minutos ya
había dispuesto de dos buenas ocasiones de gol. A los 10’ dos nuevas
aproximaciones con criterio hacían vislumbrar un encuentro de claro
dominio local, máxime por la poca consistencia que mostraban los
asturianos.
Y tanto fue el cántaro a la fuente que en el minuto 15 Hemed condujo un contraataque abriendo a la derecha para que Pereira centrase al segundo palo donde esperaba Gonzalo el Chory Castro quien sólo tuvo que poner la cabeza para adelantar a los bermellones (1-0).
Reaccionaron
los de Preciado adelantando unos metros sus líneas, logrando la primera
jugada trenzada y primer lanzamiento a puerta en el minuto 20. De
repente el Mallorca había desaparecido buscando sólo la contra y los gijonenses se habían adueñado del esférico y del terreno de juego.
Una
falta al borde del área supondría la mejor ocasión sportinguista en la
primera mitad, se produjo tras un duro lanzamiento que despejó, no sin
dificultades, Dudú Aouate.
Acabaron las
primeros 45 minutos con el partido roto debido a la trifulca originada a
raíz de una malintencionada devolución del balón de David Barral
que a punto estuvo de suponer el empate. Mucho más fútbol ofrecieron
los anfitriones aunque fueron de más a menos al tiempo que despertaban
los rojiblancos, hoy de blanco.
Tras el descanso entró Mate Bilic por Barral y en su primera oportunidad, en el 49’, estableció el empate de cabeza a centro de Lora desde la derecha, jugada que guardaba bastante similitud con el gol local (1-1).
Sin
apenas tiempo para retomar el encuentro, éste había cambiado
completamente, lo que enrabietó a los bermellones que acto seguido
dispusieron de dos buenas ocasiones, a las que no dejaron de reaccionar
los muchachos de Preciado.
Trató de buscar más peligro arriba Caparrós al
dar entrada a Víctor pero el partido había perdido en calidad aunque no
en intensidad; el balón iba de lado a lado sin demasiado criterio y
sólo alguna acción individual creaba cierto peligro hasta que llegó la
de De las Cuevas que en el 65’ se fue con facilidad de su marcador, Bigas, y su centro lo introdujo en propia meta Joao Victor (1-2).
Pudo sentenciar Bilic
en el 72 tras un error de Tejera que había salido unos instantes antes,
sustituyendo a Tissone, supuestamente para buscar más mordiente; el
disparo del delantero croata salió fuera por muy poco.
El
habitual carrusel de cambios no hizo más que romper el encuentro, gotas
de calidad asturianas y corazón mallorquín que conseguiría encerrar a
los de Preciado. Pina mereció el empate con un disparo al poste y poco más hasta el final a no ser la impotencia local.
Impotencia y sensación de haber desaprovechado una gran oportunidad, no sólo para cortar ese gafe de los últimos años ante el Sporting -son ya cuatro derrotas en las últimas seis visitas
de los asturianos-, sino también para que Caparrós logra su primera
victoria en el banquillo balear. Habrá que seguir esperando por ello, y
en la próxima jornada toca el Barcelona a domicilio...
Me gusto el Mallorca hasta que marco el Chori,despues se puso al contrataque y dejo que el sporting tuviera campo y en una jugada aislada marco Bilic otra vez fallo defensivo, y como no la desgracia de querer evitar el segundo y meter el balon en propia puerta puso el marcador final2-1,y los ultimos minutos el Mallorca tuvo oportunidades pero no hay manera.
Mucho premio para el sporting,un empate hubiera sido mas justo