La realidad de los clásicos disputados hasta el momento, dos en la temporada, ha echado por tierra el discurso pobre y chato del resultadismo más radical. Sucede que, según parece por el tono de las portadas dedicadas a José Mourinho, no todo se resume a la matemática final.
Ida del Bernabéu
R.Madrid 1 - 2Barcelona
Crónica del Partido
No hay Abismo en la grandeza
Cronología, titulares, modelos tácticos y consecuencias formales han llevado a aceptar lo que desde siempre defendemos: el resultado importa menos que el modo para conseguirlo. Todos concluyen, en este sentido, que el Real Madrid ha dado su mejor versión cuando ataca – ¡vaya descubrimiento!- que cuando elige encriptarse en los temores de su entrenador.
La otra enorme y triste conclusión es que el equipo dirigido por The Special Mou, ha ido al frente -contra el Barcelona- sólo sintiéndose perdido -no como argumento para ganar- y sin otro remedio que jugar ofensivamente o, mejor dicho, presionar más arriba. Así pues, escogiendo el cero en su portería en cada inicio eliminatorio, finalmente José Mourinho no fue capaz de conseguirlo ni de dar una imagen de grandeza que, sólo ahora, le reclaman los oportunistas.
Sin embargo, y desde esta humilde óptica, hemos venido machacando sobre la idea y el mensaje: la excelencia debe ser el objetivo de los grandes. Todo lo demás es anecdótico y tanto Real Madrid como Barcelona están destinados a trascender los tiempos. Este Madrid también lo hará, pero de forma diferente: Pepe es el gran símbolo, lamentablemente, del estilo escogido, ya fuera de dudas y de cualquier campaña organizada para minimizar al FC Barcelona. Quienes lo hicieron han caído en el ridículo y también traspasarán los límites de la memoria, siendo de dudosa ética la calidad del legado.
Expuesto lo anterior, preguntamos: ¿está perdido el Real Madrid en el Camp Nou? Y respondemos: quien lo crea cometerá un grave error. Los merengues deberán salir a matar o morir desde el inicio porque, de lo contrario, perderán seguro y dejarán una imagen de pobreza insoportable para su afición. Además, Mourinho –que juega para su satisfacción personal- quedará herido de muerte -se habla que dejará el club en junio-.
También es honesto afirmar, a su vez, que el portugués ha sido siempre el mismo, y quienes quieren culpar a Hamit Altintop y Ricardo Carvalho del 1-2 en el Santiago Bernabéu, vuelven a caer en al facilismo irresponsable. El problema, creemos, fue no morir de pie ni intentar siquiera tener el balón, redundar en Pepe como mediocentro, no dejar a uno de los centrales presionar arriba, fundamentarse en Fabio Coentrao para detener a Alves, hacer jugar a Cristiano Ronaldo y Karim Benzema como dos carrileros defensivos y, por supuesto, no tener otro plan. En resumen, no son los nombres sino la escasa respuesta colectiva porque el discurso de Mou despierta dudas entre sus dirigidos españoles, acostumbrados a ganar todo de manera diferente.
Dicho esto, desde que Mourinho se dedica a entrenar, nunca hemos visto que sus equipos dominen desde la posesión y el control de juego -en duelos de relieve-. En este sentido, auguramos que los blancos aspirarán dejar caer el peso físico en la salida de balón del Barça y si los culés se equivocan en la circulación, el Madrid puede golpear primero, dar mejor imagen pero volver eliminado. ¿Por qué? Nadie es capaz sustentar su razón de ser en el despliegue físico permanente. Por el contrario, si lograra tener la pelota y jugar ataques largos, las posibilidades aumentarían.
Pero si el míster apuesta por la marca asfixiante adelantada ¿qué debe hacer? ¿Poner a Kaká y Mesut Özil, talentosos, pero que no pueden marcar a nadie o, por el contrario, seguir jugando con volantes defensivos y ver si Cristiano consigue anotar? La gran deuda de Mourinho es, repetimos, no tener plan B. Puede ir hacia arriba y contragolpear como nadie, pero al FC Barcelona se le gana jugando y nunca queriendo terminar los ataques sin una mínima elaboración.
Sólo una vez Pep Guardiola fue sorprendido por Mourinho y nunca más regaló la espalda de forma sistemática. Apostó por la paciencia y el juego de ataque equilibrado a través del manejo temporal de Xavi Hernández, el enlace con Lionel Messi, la sociedad con Andrés Iniesta, la salida de Gerard Piqué y Sergio Busquets y la explotación de los espacios vacíos gracias a Daniel Alves y Cesc Fàbregas más la enorme aportación de Alexis Sánchez, un crack con mayúsculas. En resumen, sólo un partido horrible del Barcelona puede hacerle perder el pase a semifinales, pero si el duelo es normal –sin expulsiones prematuras y penaltis en la misma jugada-, no enontramos razones para creer lo contrario.
El Real Madrid no viaja a por un imposible porque jugadores tiene pero no el sistema de juego trabajado que requiere un mecanismo para doblegar al Barça -¡y por dos goles!-. Concluyendo, los blancos no tienen otra opción que ir a tumba abierta para matar muriendo o morir matando. Su historia necesita un mensaje así, por lo menos. ¿O no?
Barcelona Real Madrid 22.00
PINTO
PUYOL - PIQUÉ - ABIDAL
ALVES -BUSQUETS - XAVI - INIESTA
MESSI - CESC - ALEXIS
CASILLAS
ARBELOA - CARVALHO - RAMOS - MARCELO
LASS - XABI ALONSO -KAKÁ
CR7 - HIGUAÍN - ÖZIL
Pep Guardiola no tiene ninguna duda con respecto al equipo y salvo imponderables de última hora todo será como siempre.
Las críticas están dirigidas al juego defensivo de la ida y ahora se espera que el Real Madrid salga con todo en el Camp Nou.
BAJAS FUNDAMENTALES: Khedira, Di María, Pepe
BAJAS FUNDAMENTALES: Villa, Pedrito
SUSPENDIDOS: Ninguno
SUSPENDIDOS: Ninguno
IDEA Ganar y jugar bien para seguir imponiendo su forma de jugar.
IDEA Marcar primero y buscar el segundo con tranquilidad.
Vaya morbo tiene este segundo partido por lo que sucede en la casa blanca a ver si despues no enpeora
Ida del Bernabéu
R.Madrid 1 - 2Barcelona
Crónica del Partido
No hay Abismo en la grandeza
Cronología, titulares, modelos tácticos y consecuencias formales han llevado a aceptar lo que desde siempre defendemos: el resultado importa menos que el modo para conseguirlo. Todos concluyen, en este sentido, que el Real Madrid ha dado su mejor versión cuando ataca – ¡vaya descubrimiento!- que cuando elige encriptarse en los temores de su entrenador.
La otra enorme y triste conclusión es que el equipo dirigido por The Special Mou, ha ido al frente -contra el Barcelona- sólo sintiéndose perdido -no como argumento para ganar- y sin otro remedio que jugar ofensivamente o, mejor dicho, presionar más arriba. Así pues, escogiendo el cero en su portería en cada inicio eliminatorio, finalmente José Mourinho no fue capaz de conseguirlo ni de dar una imagen de grandeza que, sólo ahora, le reclaman los oportunistas.
Sin embargo, y desde esta humilde óptica, hemos venido machacando sobre la idea y el mensaje: la excelencia debe ser el objetivo de los grandes. Todo lo demás es anecdótico y tanto Real Madrid como Barcelona están destinados a trascender los tiempos. Este Madrid también lo hará, pero de forma diferente: Pepe es el gran símbolo, lamentablemente, del estilo escogido, ya fuera de dudas y de cualquier campaña organizada para minimizar al FC Barcelona. Quienes lo hicieron han caído en el ridículo y también traspasarán los límites de la memoria, siendo de dudosa ética la calidad del legado.
Expuesto lo anterior, preguntamos: ¿está perdido el Real Madrid en el Camp Nou? Y respondemos: quien lo crea cometerá un grave error. Los merengues deberán salir a matar o morir desde el inicio porque, de lo contrario, perderán seguro y dejarán una imagen de pobreza insoportable para su afición. Además, Mourinho –que juega para su satisfacción personal- quedará herido de muerte -se habla que dejará el club en junio-.
También es honesto afirmar, a su vez, que el portugués ha sido siempre el mismo, y quienes quieren culpar a Hamit Altintop y Ricardo Carvalho del 1-2 en el Santiago Bernabéu, vuelven a caer en al facilismo irresponsable. El problema, creemos, fue no morir de pie ni intentar siquiera tener el balón, redundar en Pepe como mediocentro, no dejar a uno de los centrales presionar arriba, fundamentarse en Fabio Coentrao para detener a Alves, hacer jugar a Cristiano Ronaldo y Karim Benzema como dos carrileros defensivos y, por supuesto, no tener otro plan. En resumen, no son los nombres sino la escasa respuesta colectiva porque el discurso de Mou despierta dudas entre sus dirigidos españoles, acostumbrados a ganar todo de manera diferente.
Dicho esto, desde que Mourinho se dedica a entrenar, nunca hemos visto que sus equipos dominen desde la posesión y el control de juego -en duelos de relieve-. En este sentido, auguramos que los blancos aspirarán dejar caer el peso físico en la salida de balón del Barça y si los culés se equivocan en la circulación, el Madrid puede golpear primero, dar mejor imagen pero volver eliminado. ¿Por qué? Nadie es capaz sustentar su razón de ser en el despliegue físico permanente. Por el contrario, si lograra tener la pelota y jugar ataques largos, las posibilidades aumentarían.
Pero si el míster apuesta por la marca asfixiante adelantada ¿qué debe hacer? ¿Poner a Kaká y Mesut Özil, talentosos, pero que no pueden marcar a nadie o, por el contrario, seguir jugando con volantes defensivos y ver si Cristiano consigue anotar? La gran deuda de Mourinho es, repetimos, no tener plan B. Puede ir hacia arriba y contragolpear como nadie, pero al FC Barcelona se le gana jugando y nunca queriendo terminar los ataques sin una mínima elaboración.
Sólo una vez Pep Guardiola fue sorprendido por Mourinho y nunca más regaló la espalda de forma sistemática. Apostó por la paciencia y el juego de ataque equilibrado a través del manejo temporal de Xavi Hernández, el enlace con Lionel Messi, la sociedad con Andrés Iniesta, la salida de Gerard Piqué y Sergio Busquets y la explotación de los espacios vacíos gracias a Daniel Alves y Cesc Fàbregas más la enorme aportación de Alexis Sánchez, un crack con mayúsculas. En resumen, sólo un partido horrible del Barcelona puede hacerle perder el pase a semifinales, pero si el duelo es normal –sin expulsiones prematuras y penaltis en la misma jugada-, no enontramos razones para creer lo contrario.
El Real Madrid no viaja a por un imposible porque jugadores tiene pero no el sistema de juego trabajado que requiere un mecanismo para doblegar al Barça -¡y por dos goles!-. Concluyendo, los blancos no tienen otra opción que ir a tumba abierta para matar muriendo o morir matando. Su historia necesita un mensaje así, por lo menos. ¿O no?
Barcelona Real Madrid 22.00
PINTO
PUYOL - PIQUÉ - ABIDAL
ALVES -BUSQUETS - XAVI - INIESTA
MESSI - CESC - ALEXIS
CASILLAS
ARBELOA - CARVALHO - RAMOS - MARCELO
LASS - XABI ALONSO -KAKÁ
CR7 - HIGUAÍN - ÖZIL
Pep Guardiola no tiene ninguna duda con respecto al equipo y salvo imponderables de última hora todo será como siempre.
Las críticas están dirigidas al juego defensivo de la ida y ahora se espera que el Real Madrid salga con todo en el Camp Nou.
BAJAS FUNDAMENTALES: Khedira, Di María, Pepe
BAJAS FUNDAMENTALES: Villa, Pedrito
SUSPENDIDOS: Ninguno
SUSPENDIDOS: Ninguno
IDEA Ganar y jugar bien para seguir imponiendo su forma de jugar.
IDEA Marcar primero y buscar el segundo con tranquilidad.
Vaya morbo tiene este segundo partido por lo que sucede en la casa blanca a ver si despues no enpeora