Deportivamente, Guardiola tendrá que echar mano de Víctor Valdés,
últimamente en el banquillo, ante la baja de José Manuel Pinto, quien se
estaba preparando para ser titular en la final de Copa.
Los barcelonistas solo tienen en mente el partido ante el
Athlétic en Madrid y todos los esfuerzos están puestos en cerrar la
temporada con un cuarto título, después de las conquistas de la
Supercopa de España, de Europa y Mundial de Clubes.
No es la de Pinto la única baja ante el Betis. Más importante es
la de Carles Puyol. El capitán será operado mañana de un problema en la
rodilla y estará seis semanas de baja, con lo que se quedará sin jugar
la final de Copa y la Eurocopa.
Pocos alicientes tiene el encuentro, más allá de si el argentino
Leo Messi sigue batiendo todos los registros como máximo artillero o de
si Víctor Valdés se asegura definitivamente el 'zamora'.
Regreso de Piqué
El regreso de Gerard Piqué,
después de la conmoción cerebral sufrida ante el Chelsea, y la
posibilidad de ir probando opciones para la final copera es lo único a
lo que aspira el equipo azulgrana.
Los verdiblancos, que en los últimos años han hecho sufrir mucho
al Barcelona en el Villamarín, quieren repetir gestas anteriores y
brindar una victoria a su afición para agradecerle su apoyo en una
temporada en la que el Betis, recién ascendido y en Ley Concursal, ha
hecho un buen papel al mantenerse en Primera sin sufrir.
El equipo de Pepe Mel, duodécimo con 46 puntos y que perdió sus
pocas opciones de luchar por una plaza europea tras caer en Gijón en el
último partido, llega a la última jornada con los deberes hechos y el
objetivo de la permanencia cumplido con creces. Matemáticamente lo logró
hace dos jornadas, horas antes del derbi con el Sevilla.
Precisamente, tras su sonado triunfo (1-2) en el Sánchez Pizjuán
con dos goles de falta de Beñat Etxebarría, uno de sus hombres clave,
otro aliciente para el beticismo es intentar ganar al Barcelona y, en
caso de perder el Sevilla en el campo del Espanyol, acabar por delante
de su 'eterno' rival en la clasificación.
A ello se uniría el 'alegrón' que supondría para el Betis ganar a
un adversario como el Barcelona en la despedida ante su gente de una
temporada que, en algunos momentos, ha sido difícil e irregular.
Las tres últimas visitas en liga del Barcelona se saldaron con
dos empates y una victoria bética. Los azulgrana no vencen en el
Villamarín desde la campaña 2005-06 y, además, el pasado año perdieron
3-1 en los cuartos de final de la Copa, pero les valió el 5-0 de la ida.
Mel ha anunciado que dará minutos a jugadores que se pueden ir y
merecen 'el premio de despedirse', y ha confirmado que el portugués
Nelson y el brasileño Iriney siguen lesionados, aunque recupera al
central Dorado y los medios Beñat y Cañas, que estaban sancionados.
Betis y Barcelona, sin nada en juego, echarán mañana el telón del
campeonato en el último partido liguero de Pep Guardiola, quien apura
sus días en el banquillo azulgrana tras conocer su decisión de dejar el
cargo tras la final de Copa.
últimamente en el banquillo, ante la baja de José Manuel Pinto, quien se
estaba preparando para ser titular en la final de Copa.
Los barcelonistas solo tienen en mente el partido ante el
Athlétic en Madrid y todos los esfuerzos están puestos en cerrar la
temporada con un cuarto título, después de las conquistas de la
Supercopa de España, de Europa y Mundial de Clubes.
No es la de Pinto la única baja ante el Betis. Más importante es
la de Carles Puyol. El capitán será operado mañana de un problema en la
rodilla y estará seis semanas de baja, con lo que se quedará sin jugar
la final de Copa y la Eurocopa.
Pocos alicientes tiene el encuentro, más allá de si el argentino
Leo Messi sigue batiendo todos los registros como máximo artillero o de
si Víctor Valdés se asegura definitivamente el 'zamora'.
Regreso de Piqué
El regreso de Gerard Piqué,
después de la conmoción cerebral sufrida ante el Chelsea, y la
posibilidad de ir probando opciones para la final copera es lo único a
lo que aspira el equipo azulgrana.
Los verdiblancos, que en los últimos años han hecho sufrir mucho
al Barcelona en el Villamarín, quieren repetir gestas anteriores y
brindar una victoria a su afición para agradecerle su apoyo en una
temporada en la que el Betis, recién ascendido y en Ley Concursal, ha
hecho un buen papel al mantenerse en Primera sin sufrir.
El equipo de Pepe Mel, duodécimo con 46 puntos y que perdió sus
pocas opciones de luchar por una plaza europea tras caer en Gijón en el
último partido, llega a la última jornada con los deberes hechos y el
objetivo de la permanencia cumplido con creces. Matemáticamente lo logró
hace dos jornadas, horas antes del derbi con el Sevilla.
Precisamente, tras su sonado triunfo (1-2) en el Sánchez Pizjuán
con dos goles de falta de Beñat Etxebarría, uno de sus hombres clave,
otro aliciente para el beticismo es intentar ganar al Barcelona y, en
caso de perder el Sevilla en el campo del Espanyol, acabar por delante
de su 'eterno' rival en la clasificación.
A ello se uniría el 'alegrón' que supondría para el Betis ganar a
un adversario como el Barcelona en la despedida ante su gente de una
temporada que, en algunos momentos, ha sido difícil e irregular.
Las tres últimas visitas en liga del Barcelona se saldaron con
dos empates y una victoria bética. Los azulgrana no vencen en el
Villamarín desde la campaña 2005-06 y, además, el pasado año perdieron
3-1 en los cuartos de final de la Copa, pero les valió el 5-0 de la ida.
Mel ha anunciado que dará minutos a jugadores que se pueden ir y
merecen 'el premio de despedirse', y ha confirmado que el portugués
Nelson y el brasileño Iriney siguen lesionados, aunque recupera al
central Dorado y los medios Beñat y Cañas, que estaban sancionados.
Betis y Barcelona, sin nada en juego, echarán mañana el telón del
campeonato en el último partido liguero de Pep Guardiola, quien apura
sus días en el banquillo azulgrana tras conocer su decisión de dejar el
cargo tras la final de Copa.