Ante el cántico de 'campeones, campeones' en un Santiago Bernabéu
hasta la bandera, el Real Madrid cerró con una exhibición de fútbol una
Liga que será difícil superar. Con la ambición que ha inculcado José
Mourinho a un grupo que ha hecho ganador.
Con el título conquistado y saboreado el éxito de frenar al
mejor Barça de la historia, ante el Mallorca no se relajó. Por respeto a
la competición. A los rivales. Y a su propia afición. Que disfrutó con
las ganas de sus jugadores de cerrar la temporada divirtiéndose.
Nunca nadie había alcanzado el centenar de puntos. Habla de la
fuerza y regularidad del Real Madrid. También de la desigualdad que
existe en España. Todos a años luz de dos equipos. El Mallorca fue una
nueva víctima. Llegaba en plena racha de triunfos, acariciando Europa.
En manos de un rival que le asfixió con su presión y sus ganas de
ampliar el nuevo récord de goles en una Liga que con 121 dianas, deja en
nada los 107 de la 'Quinta del Buitre'.
Desde el inicio el Real Madrid buscó los goles y ayudar a
Cristiano Ronaldo en una misión imposible. Debía marcar cinco para
alcanzar a Leo Messi como máximo artillero del campeonato. Tan
insaciable como siempre, el portugués no paró de intentarlo. Marcó el
primero, con un certero testarazo a pase de Marcelo a los 19 minutos.
Era el premio a un recital que se estrellaba con Aouate una y
otra vez. Higuaín remató arriba la primera y el árbitro le anuló un gol
legal en su segundo intento por un fuera de juego que no era. La grada
le mostraba sus deseos: 'Pipa quédate, Pipa quédate'. Khedira y Benzema
en dos ocasiones seguidas tampoco rompieron el muro.
Fue Cristiano Ronaldo quien con su tanto 60 de la temporada dio
por inaugurado el festival goleador. No tardó en sumarse a la fiesta
Benzema, en carrera tras perfecta asistencia de Higuaín. Un tridente que
ha sido clave en el éxito madridista.
La temporada del Real Mallorca tiene un gran mérito. Con una
plantilla corta y de calidad justita ha acabado rozando Europa gracias
al cambio que dio con la llegada de Joaquín Caparrós. Enseñó a competir a
un equipo que iba camino del descenso. Busco el gol siempre con 'Chory'
Castro y la movilidad de Pereira. Se estrellaron con Casillas en el
primer acto.
Recital de Özil
Nada más arrancar el segundo comenzó el festival de Mesut Özil. Es el
futbolista que cambia con su calidad una jugada. El sentido del fútbol
del equipo blanco. Hoy sustituyó las asistencias por los goles. Hizo
dos. El primero en acción individual y el segundo enganchando una volea
cruzada.
No podía ser otro, que el uruguayo Castro el que marcase el
tanto del honor para el Mallorca. En un contragolpe que culminó con un
zurdazo tan potente que dobló las manos a Casillas.
La fiesta se trasladó a la grada. Ovación especial a Higuaín en
su cambio para que deje de dudar sobre su futuro. Admiración para
Cristiano Ronaldo. El líder de una Liga para el recuerdo ya escucha cada
partido en su estadio un cántico en su honor. El Real Madrid deja
números que son el nuevo techo del fútbol español. Una Liga perfecta que
tuvo un broche de oro: 100 puntos.
El Real Madrid exhibió su mejor fútbol para golear al Real Mallorca
(4-1), en un día de fiesta en el estadio Santiago Bernabéu, que disfrutó
de la consecución del último récord, alcanzar por primera vez en la
historia 100 puntos en una Liga perfecta y un nuevo registro goleador de
121 tantos.
hasta la bandera, el Real Madrid cerró con una exhibición de fútbol una
Liga que será difícil superar. Con la ambición que ha inculcado José
Mourinho a un grupo que ha hecho ganador.
Con el título conquistado y saboreado el éxito de frenar al
mejor Barça de la historia, ante el Mallorca no se relajó. Por respeto a
la competición. A los rivales. Y a su propia afición. Que disfrutó con
las ganas de sus jugadores de cerrar la temporada divirtiéndose.
Nunca nadie había alcanzado el centenar de puntos. Habla de la
fuerza y regularidad del Real Madrid. También de la desigualdad que
existe en España. Todos a años luz de dos equipos. El Mallorca fue una
nueva víctima. Llegaba en plena racha de triunfos, acariciando Europa.
En manos de un rival que le asfixió con su presión y sus ganas de
ampliar el nuevo récord de goles en una Liga que con 121 dianas, deja en
nada los 107 de la 'Quinta del Buitre'.
Desde el inicio el Real Madrid buscó los goles y ayudar a
Cristiano Ronaldo en una misión imposible. Debía marcar cinco para
alcanzar a Leo Messi como máximo artillero del campeonato. Tan
insaciable como siempre, el portugués no paró de intentarlo. Marcó el
primero, con un certero testarazo a pase de Marcelo a los 19 minutos.
Era el premio a un recital que se estrellaba con Aouate una y
otra vez. Higuaín remató arriba la primera y el árbitro le anuló un gol
legal en su segundo intento por un fuera de juego que no era. La grada
le mostraba sus deseos: 'Pipa quédate, Pipa quédate'. Khedira y Benzema
en dos ocasiones seguidas tampoco rompieron el muro.
Fue Cristiano Ronaldo quien con su tanto 60 de la temporada dio
por inaugurado el festival goleador. No tardó en sumarse a la fiesta
Benzema, en carrera tras perfecta asistencia de Higuaín. Un tridente que
ha sido clave en el éxito madridista.
La temporada del Real Mallorca tiene un gran mérito. Con una
plantilla corta y de calidad justita ha acabado rozando Europa gracias
al cambio que dio con la llegada de Joaquín Caparrós. Enseñó a competir a
un equipo que iba camino del descenso. Busco el gol siempre con 'Chory'
Castro y la movilidad de Pereira. Se estrellaron con Casillas en el
primer acto.
Recital de Özil
Nada más arrancar el segundo comenzó el festival de Mesut Özil. Es el
futbolista que cambia con su calidad una jugada. El sentido del fútbol
del equipo blanco. Hoy sustituyó las asistencias por los goles. Hizo
dos. El primero en acción individual y el segundo enganchando una volea
cruzada.
No podía ser otro, que el uruguayo Castro el que marcase el
tanto del honor para el Mallorca. En un contragolpe que culminó con un
zurdazo tan potente que dobló las manos a Casillas.
La fiesta se trasladó a la grada. Ovación especial a Higuaín en
su cambio para que deje de dudar sobre su futuro. Admiración para
Cristiano Ronaldo. El líder de una Liga para el recuerdo ya escucha cada
partido en su estadio un cántico en su honor. El Real Madrid deja
números que son el nuevo techo del fútbol español. Una Liga perfecta que
tuvo un broche de oro: 100 puntos.
El Real Madrid exhibió su mejor fútbol para golear al Real Mallorca
(4-1), en un día de fiesta en el estadio Santiago Bernabéu, que disfrutó
de la consecución del último récord, alcanzar por primera vez en la
historia 100 puntos en una Liga perfecta y un nuevo registro goleador de
121 tantos.