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Después de darse un homenaje ante el débil Millonarios, el Real
Madrid vuelve a retomar sensaciones con la Liga, esa competición a la
que tanto le está costando aferrarse en la presente campaña. Después de
las tres victorias consecutivas ante Manchester City, Rayo Vallecano y
Millonarios parece que las aguas bajan mansas por Concha Espina, pero
ahora están recogiendo los lodos de aquellos barros. Y es que, a ocho
puntos del liderato, el Real Madrid no se puede permitir muchos más
despistes pese a que aún queden 32 jornadas por delante.
El Barcelona juega en Sevilla, mientras que el Real Madrid no tendrá
que salir de su feudo, una oportunidad a priori óptima para recortar
algún punto respecto a los hombres de Tito Vilanova. Porque lo contrario
sería todo un drama, ver planear el fantasma de los once puntos durante
toda la semana, teniendo el Clásico en el Camp Nou la próxima jornada, y
con un Barcelona que cada día que pasa olvida más los complejos que se
abrieron la temporada pasada con la derrota en Liga.
Sea como
fuere, se presenta muy interesante el encuentro en lo que concierne a la
disposición del Real Madrid, donde José Mourinho tiene varios frentes
abiertos. Se da por hecho el concurso de Sergio Ramos después de haber
jugado ante el Rayo Vallecano, pero no está tan claro quién debe ocupar
los puestos de mediocentro, mediapunta y delantero. ¿Essien o Khedira?
¿Ozil o Modric? ¿Benzema o Higuaín? Los que empezaron la temporada como
titulares parece que pierden algo de terreno y, con mes y medio de
competición, en todos los equipos poco a poco se va perfilando el once
ideal de la temporada, donde ninguno de estos seis quiere quedarse
fuera.
Y precisamente por ello también será interesante comprobar
el rol de Ricardo Kaká en un partido oficial. De momento no ha
disputado ni un minuto, pero tras su exhibición ante el Millonarios,
quién sabe si podría tener alguna oportunidad por fin en Liga. Una
situación en parte parecida a la de José Callejón, que se ha quedado
fuera de la convocatoria en los dos últimos encuentros, antes de su
doblete en el Trofeo Bernabéu. Además de estos dos jugadores, José
Mourinho contará de nuevo con Fabio Coentrao, que ha superado ya los
cuatro partidos de sanción tras su expulsión en Getafe. Lo que por
cierto deja la anecdótica situación de poder ver nada menos que hasta a
doce jugadores portugueses en el partido.
Asípues, en el bando merengue sólo faltarán los tres canteranos que
jugaron este viernes con el Castilla. El resto, todos disponibles. Una
situación parecida a la del Deportivo, pues José Luis Oltra podrá contar
con todos sus jugadores, incluso con Aythami, en su regreso al Santiago
Bernabéu tras superar su añito en el infierno de la Segunda División.
El
recién ascendido cuadro blanquiazul lleva ocho años sin ganar en el
Santiago Bernabéu, e incluso la maldición de Riazor ya fue rota por el
Real Madrid. Sin embargo, se espera un partido de campanillas, como
vienen siendo históricamente los Madrid-Deportivo, o viceversa. Y es
que, ante partidos como éstos, es inevitable recordar el Centenariazo en
la final de la Copa del Rey, el taconazo de Guti a Benzema que sirvió
precisamente para romper el maleficio merengue en feudo coruñés, la
doble pisada de balón de Zinedine Zidane, o el autopase de espuela de
Djalminha por encima de la cabeza. Y con jugadores como Ronaldo,
Benzema, Di María, Valerón o Modric en el campo, ¿quién podría asegurar
que no se volverá a vivir alguna genialidad similar?
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