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El Córdoba se ha impuesto 2-0, en el estadio Nuevo Arcángel, a la
Real Sociedad, en el partido correspondiente a los dieciseisavos de
final de la Copa del Rey, gracias a los goles de Patiño y Rennella.
Ante
un Arcángel con tres cuartos de entrada, el Córdoba demostró que bien
podría estar en Primera División. Rafael Berges presentó un once inicial
bastante serio, con las novedades de Saizar en la puerta, portero
titular en la Copa, y con Patiño arriba acompañado por Fede Vico, otra
de las novedades.
Por su parte, Philippe Montanier tiraba de rotaciones para dar
descanso a los más habituales, presentando un equipo sin sus grandes
estrellas, Griezmann y Vela, que entraría en la segunda parte. Aún así,
partía con un once con garantías.
Nada más comenzar el encuentro,
el equipo local ya dispuso de la primera oportunidad para adelantarse
en el marcador. Minuto 3 y Patiño se plantaba sólo ante Zubikarai. El
nueve blanquiverde no pudo batir al cancerbero que sacaba una mano
prodigiosa y enviaba el balón a córner. El Córdoba se hacía con la
pelota haciendo lo que más le gusta, tocar y tocar hasta encontrar el
hueco. La Real, por su parte, aguantaba la increible salida
cordobesista.
Así pues, tras una ocasión de Fede Vico a los 17
de juego, los donostiarra comenzaron a generar sus primeros
acercamientos a la meta de Saizar. Rubén Pardo de falta, pudo poner el
0-1 en el marcador, pero una mano de Saizar sacaba la pelota de la
escuadra. Minutos más tarde, fue Ifrán quien se plantó sólo ante el meta
cordobesista, pero éste aguantó y envió la pelota a córner.
Con
el descanso a la vuelta de la esquina, llegó el primero del partido.
Gran jugada de Fede Vico por la banda que probó fortuna con un potente
disparo. Patiño se interpuso en la trayectoria, y metiendo el pie, ponía
el 1-0 en el electrónico. El Arcángel se venía abajo. Con este gol nos
ibamos al descanso.
La segunda parte, arrancó con una Real que
tomó el mando. En los primeros minutos hubo varios acercamientos que la
defensa cordobesista desbarató. Los locales esperaban en su campo para
salir a la contra.
Aún así, con el paso de los minutos el
partido se equilibró y el Córdoba buscaba el segundo, pero ni uno ni
otro equipo lograban crear ocasiones. El partido estaba muy disputado y
los entrenadores movían el banquillo. Rennella entraba por Patiño,
mientras que Carlos Vela lo hacía en la Real. El mexicano avisaba con un
duro disparo que se iba desviado.
En el minuto 76, un agarrón
de Ansotegi a Fede Vico dentro del área, fue visto por el colegiado
González González, que no dudó en señalar penalti. El italiano Rennella
tomaba la responsabilidad y no fallaba la pena máxima. El Arcángel
estallaba de jubilo. 2-0 y a aguantar los últimos minutos. Ahí apareció
Saizar para desbaratar una falta de José Ángel y un remate de Mikel
González.
Poco a poco el partido llegaba a su fin y aunque el
equipo txuri urdin lo intentó, no pudo batir la portería cordobesista.
Con el pitido final, se desataba la locura en el Nuevo Arcángel. Anoeta
dictarán sentencia, pero los blanquiverdes tienen una importante ventaja
para estar en los octavos de final. Allí, salvo milagro, esperará el
Barça. El sueño cada vez más cerca. La Copa mola.
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