Los visitantes tomaron la delantera en el tiempo añadido de la
primera mitad, cuando el verano firma Adam Johnson anotó su primer gol
para el club.
El equipo local reaccionó bien, acumulando la
presión sobre la defensa del Sunderland a lo largo de la segunda mitad. Y
con 14 minutos por jugar, Marouane Fellaini inventó dos momentos de
magia para conseguir la victoria. Un gol y una asistencia para Jelavic.
En el primer gol Fellaini se encontró con un poco de espacio en el
borde del área de los visitantes. Cuellar fue lento para cerrar al
belga, lo que le permitió girar y tirar.
Segundos después,
Fellaini recibió el balón en el borde del área, pero esta vez realizó
una genial asistencia a través de las piernas de John O'Shea para
encontrar Jelavic, que no podía faltar el tiro desde apenas seis metros.
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