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Bongarts
El Bayern de Múnich se impuso por 0-2 al Augsburgo en el derbi
bávaro gracias a los goles de Müller de penalti y de Mario Gómez. El
partido estuvo en todo momento en las manos del equipo de Heycknes, que
ganaron fácilmente a su rival.
Los primeros minutos de partido
fueron un ir y venir de ocasiones, tanto locales como visitantes. El
primero en avisar fue el Augsburgo, por medio del delantero Mölders, que
recibió un centro desde la derecha, se tiró al suelo, y al levantarse
no encontraba el balón. Al momento contestó el equipo de Jupp Heynckes,
con un tiro de Müller que iba a puerta pero golpeó en la cara de
Mandzukic.
En el 8' llegaría la mejor ocasión de los locales, con una gran
jugada del extremo Musona por la banda derecha, pero su lanzamiento lo
atrapó Neuer. Partido de poco ritmo, en el que el Bayern parecía jugar
con el freno echado, sin imprimir gran velocidad a sus ataques. Las
ocasiones se sucedían, pero no demasiado claras. Una semivolea de Müller
a las manos de Amsif, un disparo desviado del croata Mandzukic. Tras
varios intentos, en el 25' llegaría una de las mejores ocasiones,
después de una buena jugada de Ribery por la izquierda, que la pone para
Mandzukic pero el meta del Augsburgo atrapa.
Sin embargo, los
locales no se amedrentaban, y a punto estuvo de marcar Werner en un tiro
lejano que le botó mal a Neuer y a punto estuvo de cometer penalti
después. Tras dos nuevos disparos de los locales, obra de Koo y Vogt,
llegaría la jugada clave de la primera parte.
El árbitro señaló
una mano clara de Sankoh dentro del área. El encargado de lanzar la pena
máxima fue Müller, que no dudó y la puso a la izquierda del portero.
0-1 después de una primera parte de control pero sin grandes ocasiones.
La última ocasión de la primera parte estuvo en la cabeza de Mölders,
que lanzó por encima de larguero un buen centro desde la izquierda.
La
segunda parte continuaría con la misma dinámica que la primera: dominio
del esférico por parte del Bayern Múnich, pero escasas ocasiones de
gol, y llegadas aisladas del equipo local.
A los quince minutos
de la segunda mitad salió el killer Mario Gómez, que demostró que está
plenamente recuperado de su lesión de principios de temporada. A los dos
minutos de entrar al campo aprovechó un buen pase en profundidad para
batir al portero local con una gran definición y poner la sentencia.
Con
el 0-2 al Augsburgo, penúltimo de la tabla, no le quedaba más remedio
que arriesgar. Y así hizo su técnico, que dió entrada al delantero Hain
por Sankoh, autor del penalti. Todavía pudo marcar otro el Bayern, pero
el tiro de Schweinsteiger lo repelió el meta Amsif. De aquí al final,
Heycknes dio descanso a Müller y Kroos por Tymoshchuk y Rafinha.
Al
final, tres nuevos puntos para el líder de la Bundesliga y una jornada
buena, tras las derrotas del Borussia Dortmund y el Schalke 04.
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