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El camino hasta Wembley ha sido largo. Después de 110 partidos, un sinfín de emociones y varios favoritos que se quedaron en el camino, Borussia Dortmund y Bayern de Múnich protagonizarán una final germana para poner el colofón a la Champions League 2012-13.
"La Orejona" busca dueño después de que Real Madrid y FC Barcelona fueran eliminados en semifinales. Los dos equipos españoles parecían llamados a disputar por fin un Clásico en el partido por el título, pero su sueño se desvaneció de forma abrupta: a los merengues no les sirvió de nada mantener viva la llama de la esperanza hasta el último minuto en el Santiago Bernabéu y los culés fueron vapuleados de forma cruel por un escandaloso parcial de 0-7 en el global de la eliminatoria.
El Bayern de Múnich es el gran favorito para hacerse con la gloria continental. Después de haberse alzado con el título de la Bundesliga con una superioridad aplastante respecto a sus otros rivales, y tras conseguir la DFB-Pokal, los hombres de Jupp Heynckes sueñan con rubricar un triplete para la historia antes del desembarco de Pep Guardiola.
"No hay nada que nos trastorne. Tenemos un objetivo claro, llevarnos la copa. Nadie podrá disuadirnos", explicó el técnico del conjunto bávaro en rueda de prensa. "Siento que todos los jugadores están concentrados".
Por su parte, el Borussia Dortmund llega con piel de cordero a su cita en Wembley. Los "Schwarzgelben" no ganan el título desde 1997, pero se han convertido en una verdadera bestia negra para su rival, al que arrebataron la Bundesliga en 2010-11 y 2011-12. Sin embargo, este año el conjunto capitaneado por Jürgen Klopp, gran sensación de esta edición de la Liga de Campeones, aún no ha conseguido hacerle morder el polvo al Bayern.
El arrojo del técnico nacido en Stuttgart, de 45 años, refleja la ambición de un conjunto capaz de dar la sorpresa: "La única forma de alcanzar el sueño es ser valiente. Y es lo que intentamos hacer. No tenemos miedo".
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El Bayern de Múnich es el gran favorito para hacerse con la gloria continental. Después de haberse alzado con el título de la Bundesliga con una superioridad aplastante respecto a sus otros rivales, y tras conseguir la DFB-Pokal, los hombres de Jupp Heynckes sueñan con rubricar un triplete para la historia antes del desembarco de Pep Guardiola.
"No hay nada que nos trastorne. Tenemos un objetivo claro, llevarnos la copa. Nadie podrá disuadirnos", explicó el técnico del conjunto bávaro en rueda de prensa. "Siento que todos los jugadores están concentrados".
Por su parte, el Borussia Dortmund llega con piel de cordero a su cita en Wembley. Los "Schwarzgelben" no ganan el título desde 1997, pero se han convertido en una verdadera bestia negra para su rival, al que arrebataron la Bundesliga en 2010-11 y 2011-12. Sin embargo, este año el conjunto capitaneado por Jürgen Klopp, gran sensación de esta edición de la Liga de Campeones, aún no ha conseguido hacerle morder el polvo al Bayern.
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