El Milan cerró una de sus peores semanas tras las duras derrotas ante Fiorentina y Barcelona empatando en Verona ante el último clasificado del campeonato y dejando, otra vez, una pobre imagen en el terreno de juego.
El primer tiempo nos dejó muy mal sabor de boca, con un Milan dispuesto a tener el balón, pero sin las ideas claras en la forma de llevar a cabo dicha tarea. En los primeros diez minutos, tanto uno como otro equipo tantearon el terreno y se dedicaron más a esperar las acciones del rival, hecho que provocó varios contragolpes rápidos. Estigarribia por un lado y Muntari por otro dispusieron de las dos oportunidades más claras, pero sus disparos acabaron con intervención de los guardametas y sin demasiado peligro.
A partir del primer cuarto de hora, el Milan se hizo definitivamente con el balón, pero lo hizo sin una lógica aparente, con Kaká bajando a recibir en el centro del campo, Muntari y Poli perdidos en terreno de nadie y con los laterales con disposición de jugar el esférico, pero con problemas de precisión a la hora de hacerlo. Montolivo y De Jong se volvían locos por distribuir el juego, todos los balones pasaban por ellos y entre los dos intentaban crear en busca de un desmarque, pero la descolocación de sus compañeros y la incesante lucha de Matri con tres centrales hicieron imposibles las penetraciones dentro del área.
En la única jugada que Matri pudo recibir de espaldas le dejó un buen balón a Poli, pero el italiano remató demasiado desviado y desaprovechó la mejor ocasión de unos primeros 45 minutos insufribles.
A los 6 minutos del segundo tiempo y tras una pérdida de Kaká, el Chievo tuvo la ocasión más clara del partido. Tras el contraataque llevado por Paloschi, Thereau consiguió un buen disparo que rechazó Abbiati, dejando el balón muerto para la llegada de Rigoni, que sin portero remató a la parte lateral de la red. Poco después, el Milan volvió a hacerse con el balón y tras varios minutos de insistencia llegaron las ocasiones: tres disparos lejanos, uno de Kaká, otro de Emanuelson y el tercero de Mexès, que pusieron presión sobre la portería de Puggioni y animaron a los de Allegri a seguir en busca del gol con más insistencia.
Con la entrada de Robinho el Milan pasó de un 4-4-2 a un 4-3-3, con Kaká y su compatriota en las bandas y, con esa disposición, siguió creando peligro. Una buena jugada del ‘7’ terminó con un disparo de Poli desviado, en la que fue el preludio de las dos mejores ocasiones rossoneri del partido. En el 30, una brillante asistencia de Constant para Robinho acabó con el brasileño encarando a Puggioni y rematando de con un disparo potente que pegó en el palo. Dos minutos después, Matri remató fuera un preciso centro de Emanuelson.Fuente goal.com
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En la única jugada que Matri pudo recibir de espaldas le dejó un buen balón a Poli, pero el italiano remató demasiado desviado y desaprovechó la mejor ocasión de unos primeros 45 minutos insufribles.
A los 6 minutos del segundo tiempo y tras una pérdida de Kaká, el Chievo tuvo la ocasión más clara del partido. Tras el contraataque llevado por Paloschi, Thereau consiguió un buen disparo que rechazó Abbiati, dejando el balón muerto para la llegada de Rigoni, que sin portero remató a la parte lateral de la red. Poco después, el Milan volvió a hacerse con el balón y tras varios minutos de insistencia llegaron las ocasiones: tres disparos lejanos, uno de Kaká, otro de Emanuelson y el tercero de Mexès, que pusieron presión sobre la portería de Puggioni y animaron a los de Allegri a seguir en busca del gol con más insistencia.
Con la entrada de Robinho el Milan pasó de un 4-4-2 a un 4-3-3, con Kaká y su compatriota en las bandas y, con esa disposición, siguió creando peligro. Una buena jugada del ‘7’ terminó con un disparo de Poli desviado, en la que fue el preludio de las dos mejores ocasiones rossoneri del partido. En el 30, una brillante asistencia de Constant para Robinho acabó con el brasileño encarando a Puggioni y rematando de con un disparo potente que pegó en el palo. Dos minutos después, Matri remató fuera un preciso centro de Emanuelson.Fuente goal.com
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