Sevilla y Betis han protagonizado duelos de altura en los últimos años. Un derbi es impredecible y las sorpresas y emociones que dejan en el aficionado de los dos equipos y en el amante del fútbol son imborrables. Estos son los cinco momentos para el recuerdo de la última década del balompié hispalense.
La manita
El último gran recuerdo de la afición sevillista. Con un Sevilla venido a menos a las órdenes de Míchel, el Betis llegaba al Pizjuán por encima en la tabla, pero se llevó uno de los peores correctivos de la historia de los derbis. En el segundo 16, Reyes, desatado toda la noche, ya había hecho el primero. Al descanso el marcador reflejaba un contundente 4-0. Los béticos no sabían dónde meterse y el quinto gol, obra de Rakitic, endulzó definitivamente la noche y desató todo tipo de chistes sobre el 5-1. Guasa y fútbol en estado puro.
El "Beñatazo"
Antepenúltima jornada de la temporada 2011/2012. Los hispalenses recibían en su casa a un Betis ya salvado con la ambición de reengancharse a última hora a los puestos europeos. Todo empezó bien con un tempranero gol de Negredo, pero en Nervión no contaban con la intervención de Beñat. El vasco empató de falta antes del descanso. El Sevilla se disolvía como un azucarillo y los verdiblancos, crecidos, sentenciaron el partido en el descuento con una genialidad del ahora jugador del Athletic. El “10” sacó todo su ingenio y lanzó una falta por debajo de la barrera que sorprendió a todos y dejó helado al coliseo nervionense.
Morir matando
El año 2009 fue más que aciago para el Betis. El equipo, aún bajo el reinado del terror de Manuel Ruiz de Lopera, acabó marchándose a segunda división, pero dejó para el recuerdo de los béticos una victoria en Nervión 13 años después. Oliveira y Sergio García helarían al Pizjuán con dos golazos en los que se aprovecharon de las tremendas carencias defensivas de unos sevillistas que acabarían en Champions. En una fría noche de febrero, un millar de hinchas verdiblancos tocaron la gloria en tierra hostil. El descenso dolió, pero tras el asalto en el Pizjuán, que le quitaran lo bailado.
La obra de arte de Renato
Nervión era una fiesta, sólo unas semanas antes el Sevilla había conquistado ante el Barcelona la Supercopa de Europa. Tercera jornada liguera y llegaba el eterno rival. La cosa parecía ponerse bien para los sevillistas cuando antes de la media hora de juego, Kanouté, que ese año haría su mejor temporada, marcó el primero de la tarde. Sin embargo, el Betis no acusó el golpe y remontó de la mano de dos goles del brasileño Rafael Sobis. Con la desventaja, el Sevilla comenzó un acoso a Doblas y de nuevo el "12" de Mali hizo la igualada. A cinco minutos del final, Renato se convirtió en malabarista; se marchó a base de sombreros y regates de tres rivales y la puso en la escudra. Remontada para seguir la fiesta.
La magia regresó a primera
En la 2001/2002 volvieron a primera división tras un año de calvario. Sin embargo, las dos primeras temporadas tras el regreso dejaron partidos broncos y poco estéticos en los que el miedo a perder atenazaba las piernas de los dos equipos. No fue hasta el otoño de 2003 cuando brindaron fútbol de muchos quilates, abanderados por su canteranos, Reyes y Joaquín. Los de casa golpearon primero con un gran gol del utrerano en remate acrobático. El Betis respondió con dos goles de cabeza de Denilson y Tote para ponerse por delante. El Sevilla parecía hundido pero la raza de Antoñito los rescató. El canterano regaló una jugada y un chut para guardar en videotecas que estableció la igualada final a dos tantos.
Fuente goal.com
COMENTARIO REGISTRATE en Mundo-deportes, pide nick y contraseña y correo por ello no recibirás publicidad y es gratis, no olvidar dejar un mensaje en el foro para que se active el registro.
http://www.mundo-deportes.com/
La manita
El último gran recuerdo de la afición sevillista. Con un Sevilla venido a menos a las órdenes de Míchel, el Betis llegaba al Pizjuán por encima en la tabla, pero se llevó uno de los peores correctivos de la historia de los derbis. En el segundo 16, Reyes, desatado toda la noche, ya había hecho el primero. Al descanso el marcador reflejaba un contundente 4-0. Los béticos no sabían dónde meterse y el quinto gol, obra de Rakitic, endulzó definitivamente la noche y desató todo tipo de chistes sobre el 5-1. Guasa y fútbol en estado puro.
El "Beñatazo"
Antepenúltima jornada de la temporada 2011/2012. Los hispalenses recibían en su casa a un Betis ya salvado con la ambición de reengancharse a última hora a los puestos europeos. Todo empezó bien con un tempranero gol de Negredo, pero en Nervión no contaban con la intervención de Beñat. El vasco empató de falta antes del descanso. El Sevilla se disolvía como un azucarillo y los verdiblancos, crecidos, sentenciaron el partido en el descuento con una genialidad del ahora jugador del Athletic. El “10” sacó todo su ingenio y lanzó una falta por debajo de la barrera que sorprendió a todos y dejó helado al coliseo nervionense.
Morir matando
El año 2009 fue más que aciago para el Betis. El equipo, aún bajo el reinado del terror de Manuel Ruiz de Lopera, acabó marchándose a segunda división, pero dejó para el recuerdo de los béticos una victoria en Nervión 13 años después. Oliveira y Sergio García helarían al Pizjuán con dos golazos en los que se aprovecharon de las tremendas carencias defensivas de unos sevillistas que acabarían en Champions. En una fría noche de febrero, un millar de hinchas verdiblancos tocaron la gloria en tierra hostil. El descenso dolió, pero tras el asalto en el Pizjuán, que le quitaran lo bailado.
La obra de arte de Renato
Nervión era una fiesta, sólo unas semanas antes el Sevilla había conquistado ante el Barcelona la Supercopa de Europa. Tercera jornada liguera y llegaba el eterno rival. La cosa parecía ponerse bien para los sevillistas cuando antes de la media hora de juego, Kanouté, que ese año haría su mejor temporada, marcó el primero de la tarde. Sin embargo, el Betis no acusó el golpe y remontó de la mano de dos goles del brasileño Rafael Sobis. Con la desventaja, el Sevilla comenzó un acoso a Doblas y de nuevo el "12" de Mali hizo la igualada. A cinco minutos del final, Renato se convirtió en malabarista; se marchó a base de sombreros y regates de tres rivales y la puso en la escudra. Remontada para seguir la fiesta.
La magia regresó a primera
En la 2001/2002 volvieron a primera división tras un año de calvario. Sin embargo, las dos primeras temporadas tras el regreso dejaron partidos broncos y poco estéticos en los que el miedo a perder atenazaba las piernas de los dos equipos. No fue hasta el otoño de 2003 cuando brindaron fútbol de muchos quilates, abanderados por su canteranos, Reyes y Joaquín. Los de casa golpearon primero con un gran gol del utrerano en remate acrobático. El Betis respondió con dos goles de cabeza de Denilson y Tote para ponerse por delante. El Sevilla parecía hundido pero la raza de Antoñito los rescató. El canterano regaló una jugada y un chut para guardar en videotecas que estableció la igualada final a dos tantos.
Fuente goal.com
COMENTARIO REGISTRATE en Mundo-deportes, pide nick y contraseña y correo por ello no recibirás publicidad y es gratis, no olvidar dejar un mensaje en el foro para que se active el registro.
http://www.mundo-deportes.com/