Omar Cook, Joseph Gomis, Pooh Jeter, Shammond Williams, Zabian Dowdell, Terrell McIntyre, Panchi Barrera, Rafal Freire, Carlinhos Cobos... y Rodney Blakney. Él será el décimo base del equipo verde en sólo un año. La maldición del puesto de director de juego, con lesiones, malas elecciones y bajos rendimientos, ha traído a Málaga, como sustituto temporal de McIntyre, a Rodney Blakney. El americano con pasaporte búlgaro tiene 34 años y disputó su último partido oficial en mayo, hace casi seis meses.
Desde entonces se ha entrenado individualmente, fuera de la dinámica de un equipo, y pendiente de un grave asunto familiar. Blakney dio el sí al Unicaja en la tarde-noche del miércoles, ayer envió firmado su contrato por dos meses y llegará mañana a Málaga. Podrá ver en directo el duelo contra el Estudiantes del domingo en el Martín Carpena.
Con Blakney, el Unicaja ficha un base de equipo, sin grandes números, pero con experiencia y saber estar. Este trotamundos del baloncesto, de raza negra, nacido en Hartsville el 6 de agosto de 1976, incluso ha sido internacional con la selección de Bulgaria, por lo que tiene pasaporte comunitario.
Mide 1,81 metros y la pasada temporada jugó en el Panellinios griego, donde también disputó la EuroCup. El Dynamo de Moscú (06/07) y el Olympiacos griego (07/08) representan el mejor aval de su currículum, cuando Blakney vivía su momento álgido en el básket europeo, a donde llegó tras intentonas en el baloncesto de la República Dominicana y en ligas menores de Estados Unidos.
Las pasada campaña firmó en el Panellinios números más que decentes: 12.1 puntos, 1.9 rebotes y 2.4 asistencias en la Liga helena, con altos porcentajes que superan el 40% en tiros de tres.
La incógnita ahora es saber cómo se amoldará a la exigencia de la ACB, donde nunca ha militado, y a un Unicaja en progresión tras tanto tiempo parado, sin equipo y entrenándose por su cuenta.
Aunque viene mayorcito de edad,creo va aportar bastante al equipo
Desde entonces se ha entrenado individualmente, fuera de la dinámica de un equipo, y pendiente de un grave asunto familiar. Blakney dio el sí al Unicaja en la tarde-noche del miércoles, ayer envió firmado su contrato por dos meses y llegará mañana a Málaga. Podrá ver en directo el duelo contra el Estudiantes del domingo en el Martín Carpena.
Con Blakney, el Unicaja ficha un base de equipo, sin grandes números, pero con experiencia y saber estar. Este trotamundos del baloncesto, de raza negra, nacido en Hartsville el 6 de agosto de 1976, incluso ha sido internacional con la selección de Bulgaria, por lo que tiene pasaporte comunitario.
Mide 1,81 metros y la pasada temporada jugó en el Panellinios griego, donde también disputó la EuroCup. El Dynamo de Moscú (06/07) y el Olympiacos griego (07/08) representan el mejor aval de su currículum, cuando Blakney vivía su momento álgido en el básket europeo, a donde llegó tras intentonas en el baloncesto de la República Dominicana y en ligas menores de Estados Unidos.
Las pasada campaña firmó en el Panellinios números más que decentes: 12.1 puntos, 1.9 rebotes y 2.4 asistencias en la Liga helena, con altos porcentajes que superan el 40% en tiros de tres.
La incógnita ahora es saber cómo se amoldará a la exigencia de la ACB, donde nunca ha militado, y a un Unicaja en progresión tras tanto tiempo parado, sin equipo y entrenándose por su cuenta.
Aunque viene mayorcito de edad,creo va aportar bastante al equipo