La Real Sociedad se encontró con un
milagro en el partido que enfrentó al conjunto txuri urdin contra el
Málaga en el estadio de Anoeta. Los locales, que llegaban todavía con el
recuerdo del gol de Iñigo Martínez ante el Betis la pasada jornada,
comenzaron jugando bien ante su público y pronto se adelantaron en el
marcador: no se había cumplido el minuto diez cuando un cabezazo de
Agirretxe se estrelló en el palo y golpeó en Demichelis, para acabar
metiéndose en la portería de Willy Caballero.
Tuvieron
alternativas ambos equipos después del tanto, pero poco a poco el Málaga
empezó a hacerse con el mando del encuentro según avanzaba la primera
parte. Los costasoleños empezaron a mostrarse más fiables en línea
defensiva y se asociaron en ataque con mayor lucidez.
Fruto de
ello, llegó el tanto del empate. Una buena jugada entre Isco y Rondón
terminó con el cabezazo del venezolano para nivelar la contienda antes
de visitar los vestuarios y dejar el encuentro con todo por decidir.
En
la segunda mitad, la Real Sociedad acusó el golpe recibido y fue
perdiendo protagonismo en el encuentro. Por aquel entonces, el Málaga
trenzaba el juego y disponía de las mejores ocasiones. Sin embargo, no
sería hasta la hora de encuentro cuando llegaría el tanto visitante: un
fallo garrafal de Mikel González dejó solo a Seba Fernández para que
este pusiera el 1-2 en el marcador.
El Málaga dominaba el
encuentro y Pellegrini pedía a sus jugadores que buscasen la sentencia
de un choque en el que parecía que la Real se había quedado sin margen
de maniobra. Sin embargo, un fogonazo de los hombres de Montanier
contradijo a la lógica para dar la vuelta al encuentro en menos de tres
minutos.
Carlos Vela puso el empate en el minuto 89 con una
preciosa chilena que desató el delirio de la hinchada donostiarra, que
veía como su equipo empataba al final del partido. Sin embargo, ni los
más optimistas eran capaces de predecir lo que ocurriría solo cien
segundos después: Ifrán cazó un balón y fue capaz de marcar ante
Caballero para consumar una remontada espectacular.
Con este
resultado, la Real Sociedad suma su segunda victoria consecutiva y
abandona de forma provisional los puestos de peligro, mientras que el
Málaga pierde tres puntos importantes en su lucha por perseguir los
puestos de Liga de Campeones.
Un Malaga que merecio ganar y una Real que es capaz de remontar.
milagro en el partido que enfrentó al conjunto txuri urdin contra el
Málaga en el estadio de Anoeta. Los locales, que llegaban todavía con el
recuerdo del gol de Iñigo Martínez ante el Betis la pasada jornada,
comenzaron jugando bien ante su público y pronto se adelantaron en el
marcador: no se había cumplido el minuto diez cuando un cabezazo de
Agirretxe se estrelló en el palo y golpeó en Demichelis, para acabar
metiéndose en la portería de Willy Caballero.
Tuvieron
alternativas ambos equipos después del tanto, pero poco a poco el Málaga
empezó a hacerse con el mando del encuentro según avanzaba la primera
parte. Los costasoleños empezaron a mostrarse más fiables en línea
defensiva y se asociaron en ataque con mayor lucidez.
Fruto de
ello, llegó el tanto del empate. Una buena jugada entre Isco y Rondón
terminó con el cabezazo del venezolano para nivelar la contienda antes
de visitar los vestuarios y dejar el encuentro con todo por decidir.
En
la segunda mitad, la Real Sociedad acusó el golpe recibido y fue
perdiendo protagonismo en el encuentro. Por aquel entonces, el Málaga
trenzaba el juego y disponía de las mejores ocasiones. Sin embargo, no
sería hasta la hora de encuentro cuando llegaría el tanto visitante: un
fallo garrafal de Mikel González dejó solo a Seba Fernández para que
este pusiera el 1-2 en el marcador.
El Málaga dominaba el
encuentro y Pellegrini pedía a sus jugadores que buscasen la sentencia
de un choque en el que parecía que la Real se había quedado sin margen
de maniobra. Sin embargo, un fogonazo de los hombres de Montanier
contradijo a la lógica para dar la vuelta al encuentro en menos de tres
minutos.
Carlos Vela puso el empate en el minuto 89 con una
preciosa chilena que desató el delirio de la hinchada donostiarra, que
veía como su equipo empataba al final del partido. Sin embargo, ni los
más optimistas eran capaces de predecir lo que ocurriría solo cien
segundos después: Ifrán cazó un balón y fue capaz de marcar ante
Caballero para consumar una remontada espectacular.
Con este
resultado, la Real Sociedad suma su segunda victoria consecutiva y
abandona de forma provisional los puestos de peligro, mientras que el
Málaga pierde tres puntos importantes en su lucha por perseguir los
puestos de Liga de Campeones.
Un Malaga que merecio ganar y una Real que es capaz de remontar.