No pasaban de las 16.20 cuando se reunieron las hinchadas de los dos
clubs de tercera. Por un lado unos cuantos fans del Compostela que se
habían desplazado a Ferrol y por el otro los Diablos Verdes, la facción
más radical de la hinchada del Racing, quienes volcaron un contenedor de
vidrio, convirtiendo la batalla campal en un vaivén de botellas.
La policía municipal de Ferrol tuvo que desplazar a todos sus
efectivos a la zona, cercana a A Malata, para controlar la situación.
Pese a que no se produjo ninguna detención, se continua identificando a
los implicados gracias a las imágenes captadas por la televisión gallega
TVG.
El dispositivo de seguridad especial no se había llevado a
cabo para el partido ya que el Racing no esperaba que se produjeran
desplazamientos de fans del Compostela, aunque en total se estima que
unos 20 hinchas del club santiagués estuvieron implicados en el
incidente.
Fans de ambos equipos se citaron a través de las redes sociales en A Malata horas antes del clásico de la Tercera División, obligando a la policía municipal de Ferrol a intervenir