El argentino llegó a tener pie y medio fuera del club blanco, pero ahora por fin ya se siente ‘valorado’
La realidad del fútbol mundial ha dado un importante vuelco en las dos últimas temporadas que ha situado al FC Barcelona como el indiscutible jerarca y como el club en el que querría militar cualquier futbolista que se precie tanto por los resultados como por la calidad sin parangón de sus juego. Por ello, a la secretaría técnica blaugrana le son ofrecidos múltiples jugadores casi cada día... lo curioso del caso es que entre ellos estuvo el delantero madridista Gonzalo Higuaín.
Harto de que sus goles no fueran debidamente reconocidos por los dirigentes blancos ni por la afición, el argentino empezó a tensar la cuerda a comienzos del año. Sin embargo, Higuaín no es del agrado de un Florentino Pérez que sólo quiere estrellas y huye de los ‘currantes’, por lo que no encontró la respuesta que esperaba sobre su merecida renovación con mejora contractual incluida.
Se acercaba el final de la pasada campaña y la situación empezó a estancarse tanto que surgieron las especulaciones en torno a un posible cambio de aires del ‘Pipita’. El jugador estaba cada día más descontento, por lo que a finales de mayo decidió radicalizar su postura y se ofreció a través de un intermediario a Sandro Rosell, que por aquel entonces aún estaba enfrascado en la batalla por la presidencia.
El actual máximo mandatario blaugrana no tenía capacidad de maniobra al ser todavía Joan Laporta el presidente, por lo que no se profundizó en un hipotético fichaje de Higuaín por el FC Barcelona. Según este intermediario, el jugador no era feliz en la entidad merengue y veía al Barça como la mejor vía de escape y, de paso, como un arma letal para vengarse de los dirigentes blancos.
El ‘Pipita’ llegó al Real Madrid en diciembre de 2006 procedente de River Plate y en su primera media campaña sólo hizo dos tantos, cifra que aumentó a nueve en la siguiente, 23 en la temporada 2008/09 y un total de 29 ‘dianas’ en la pasada. En la actual, pese a sus problemas físicos ya suma 10 tantos.
Sin embargo, tras firmar en junio su renovación hasta la conclusión de la campaña 2015/16 y mejorar notablemente sus emolumentos, Gonzalo Higuaín ya se siente justamente valorado y ha dejado de soñar con el FC Barcelona.