Primera victoria de Míchel con el Sevilla en el Sánchez Pizjuán.
El equipo andaluz ha mostrado su mejor y renovada cara ante su afición
en un partido en el que todos arrimaron el hombro para terminar
llevándose los tres puntos.
El partido comenzó con claro dominio
local. El Sevilla no sólo tenía la pelota, sino que atacaba una y otra
vez en busca del primer gol del partido, que terminó llegando en las
botas de Medel después de un remate desde la frontal del área que se coló pegado al palo de Andrés Fernández.
Tras
este tanto, el equipo local bajó una marcha en ataque, aunque no en
posesión, por lo que la primera parte se terminó con relativa
tranquilidad en la capital andaluza.
Ya en el segundo tiempo,
Osasuna se vio obligado a buscar el empate y adelantó sus líneas, aunque
también hizo sentirse peligroso a un Sevilla que aprovechó una y otra
vez la velocidad de Jesús Navas para montar contragolpes muy peligrosos.
Tras
varios sustos para uno y otro equipo, con dos grandes paradas de Palop
por el medio, el Sevilla logró al fin sentenciar el partido en el minuto
93 de juego. Como no podía ser de otra forma, el último contragolpe de Jesús Navas terminó con un pase de la muerte que Trochowski no falló, poniendo la puntilla
al final y dejando muy buenas sensaciones en el estreno liguero de
Míchel en el Pizjuán. Osasuna, que venía en buena forma, se marcha a
casa con los bolsillos vacíos pero después de ofrecer una buena imagen
en uno de los campos más complicados y calientes de la Liga BBVA.
El Sevilla mostro su mejor cara y gano 2-0 ante el Osasuna a ver si confirma su mejoria en las proximas jornadas.