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La jornada 12 de la Premier League nos deparaba uno de los
grandes partidos que se pueden ver en Inglaterra, el derbi londinense
entre Arsenal y Tottenham. Los dos equipos llegaban al encuentro con la
necesidad imperiosa de ganar, y por eso este se presumía como uno de
los derbis más igualados de los últimos años. Séptimo contra octavo, con
tan sólo un punto de diferencia entre ambos. Partido a todo o nada.
El Arsenal salía como favorito, pues jugaba ante su hinchada y las
estadísticas jugaban a su favor. El Tottenham sólo había ganado una de
las últimas 16 visitas a los ‘gunners’. De hecho, la temporada pasada
este partido fue de los mejores en la Premier, con una gran remontada de
los de Wenger que se hicieron con el ‘match’ por 5-2. El choque
prometía goles, como siempre que se han enfrontado estos dos equipos.
En las alineaciones iniciales, más sorpresas en la de Villas-Boas que
en la de Wenger. En los ‘Spurs’ destacaba la titularidad del guardameta
Hugo Lloris en lugar de Brad Friedel, y también sorprendía la dupla
atacante formada por Defoe y Adebayor, que jugaban juntos por primera
vez en la temporada. Para los ‘gunners’ solo cambiaba conforme a los
últimos partidos el regreso de Wojciech Szczesny tras su lesión.
Llegarían pronto los goles al Emirates Stadium, y el primero sería
para los visitantes. En el minuto 10 de la primera mitad, Adebayor
volvería a marcar a su ex equipo y a celebrarlo con rabia ante su
antigua hinchada. Vertonghen puso un balón perfecto a las espaldas de
una débil defensa ‘gunner’ para que Defoe se quedara sólo ante la
portería de Szczesny, que desvió mal el remate del inglés y dejó el
esférico muerto para que el togolés hiciera el 0-1.
Pero Adebayor dio una de cal y otra de arena a su equipo, y es que si
en el 10 marcó gol, tan sólo 7 minutos después el togolés trastocó los
plantes de Vilas-Boas al dejar a los Spurs con un jugador menos tras un
planchazo sobre Cazorla, que Howard Webb consideró suficiente para
expulsar al delantero del terreno de juego y dejar a los visitante con
uno menos durante 70 minutos.
Y no tardó mucho el Arsenal en aprovechar su superioridad numérica
para igualar el partido. En el minuto 23 Walcott hizo una grandísima
jugada por banda derecha y puso el balón al punto de penalti, donde
apareció Mertesacker para rematar de cabeza a la misma escuadra y marcar
un golazo. Primeros minutos de infarto en el Emirates.
El Arsenal estuvo asediando durante toda la primera mitad la portería
de Lloris ante un Tottenham muy afectado por la expulsión de Adebayor.
En el minuto 41 llegaría el segundo gol ‘guuner’, obra de Podolski con
algo de suerte. Y tan sólo 5 minutos después llegaría el 3-1 de las
botas de Giroud, tras una excepcional jugada de Cazorla que puso el
balón al corazón del área para que el francés batiera a su compatriota.
El encuentro se ponía cuesta abajo para los locales.
André Villas-Boas vio claro que tenía que cambiar algo para dar la
vuelta al partido, y en la media parte quitó a Walker y Naughton para
introducir a Dempsey y Dawson. El Tottenham afrontaría toda la segunda
mitad con una defensa de tres formada por Vertonghen, Gallas y Dawson,
el técnico portugués decidía correr un riesgo total.
Y aunque parecía que los ‘Spurs’ empezaban a hacerse con el control
en el inicio de la segunda parte, en el minuto 60 el Arsenal volvió a
golpear fuerte a sus vecinos del norte. Tras una gran jugada colectiva,
Podolski puso el balón al segundo palo para que Cazorla rematara y
lograra el 4-1. El equipo de Villas-Boas podía salir muy tocado del
Emirates.
En el minuto 71, Gareth Bale sacó el orgullo y dio algo de esperanza a
los visitantes con un derechazo desde la frontal del área. Aun así, la
remontada del Tottenham se veía imposible por el dominio ‘gunner’
durante gran parte del partido, y así fue definitivamente. A pesar de
que los Spurs tuvieron alguna oportunidad para acercarse en el marcador,
el Arsenal sentenció el encuentro con un gol de Walcott en el 92, que
culminaba así un grandísimo partido.
Se llegó así al final del partido con el mismo resultado que la
temporada anterior, 5-2. El Arsenal superaba así a sus vecinos en la
tabla, y el Tottenham salía hundido del Emirates Stadium y con la
sensación que con 11 jugadores hubiera podido hacer más.
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