Un Milan cumplidor ha sido agraciado con tres goles que certifican el acceso de los 'rossoneros' al sorteo de la Champions que se celebrará mañana en Mónaco. Un doblete de Boateng y otro de Balotelli han doblegado a un bisoño PSV que ha demostrado su inexperiencia en el fútbol de máximo nivel y que apenas ha dado la impresión en ciertas fases de poder competir de tú a tú frente a un conjunto milanista que se ha llevado un desproporcionado botín.
La única eliminatoria preliminar de la Champions con dos campeones de Europa presentaba la incertidumbre del marcador. El 1-1 registrado en Eindhoven abría las posibilidades de clasificación a ambas escuadras, forzando a los visitantes a marcar. Sin embargo, los primeros en golpear fueron los 'rossoneros' con un latigazo de Boateng raso y seco en el minuto 9. El gol se antojaba como una prueba de fuego para comprobar la madurez del jovencísimo equipo holandés.
El conjunto de la Philips jugaba con demasiado respeto. El ajustado punto de mira de Maher topaba con la agilidad del meta Abbiati. Un breve escarceo al que no continuaban otras oleadas de ataque. Y así era difícil que los rojiblancos, hoy de azul marino, nivelaran el electrónico. Es más, una volea de Montolivo y un violento disparo de El Shaarawy -que golpeaba en el larguero- pudieron haber sentenciado definitivamente el envite, sin despeinarse, a la media hora de juego.
PARA LEER TODA LA NOTICIA HAY QUE METER UN MENSAJE
REGISTRATE en Mundo-deportes, pide nick y contraseña y correo por ello no recibirás publicidad y es gratis, no olvidar dejar un mensaje en el foro para que se active el registro
La única eliminatoria preliminar de la Champions con dos campeones de Europa presentaba la incertidumbre del marcador. El 1-1 registrado en Eindhoven abría las posibilidades de clasificación a ambas escuadras, forzando a los visitantes a marcar. Sin embargo, los primeros en golpear fueron los 'rossoneros' con un latigazo de Boateng raso y seco en el minuto 9. El gol se antojaba como una prueba de fuego para comprobar la madurez del jovencísimo equipo holandés.
El conjunto de la Philips jugaba con demasiado respeto. El ajustado punto de mira de Maher topaba con la agilidad del meta Abbiati. Un breve escarceo al que no continuaban otras oleadas de ataque. Y así era difícil que los rojiblancos, hoy de azul marino, nivelaran el electrónico. Es más, una volea de Montolivo y un violento disparo de El Shaarawy -que golpeaba en el larguero- pudieron haber sentenciado definitivamente el envite, sin despeinarse, a la media hora de juego.
PARA LEER TODA LA NOTICIA HAY QUE METER UN MENSAJE
REGISTRATE en Mundo-deportes, pide nick y contraseña y correo por ello no recibirás publicidad y es gratis, no olvidar dejar un mensaje en el foro para que se active el registro